Se estrenó brevemente en salas este título realizado por Ian Bonhote y Peter Ettedgui años después de “McQueen”. Christopher Reeve era una estrella de cine mundial, pero en 1995 sufrió un accidente casi mortal motando a caballo que le dejó paralizado del cuello para abajo. Después se convirtió en activista en favor de los tratamientos para las lesiones medulares y los derechos de las personas con discapacidad. En el veinte aniversario de su muerte, este notable documental estadounidense sobre la vida íntima del actor habla de su infancia, su ascenso a la fama, su accidente y su posterior lucha por visibilizar la discapacidad y lograr financiación para la investigación. Quizás la película hace un repaso convenciónal su vida si bien resulta una elegía lejos de la hagiografía y cuenta una historia de resistencia humana. Además, a nivel formal, el largometraje combina bien imágenes de archivo, entrevistas emotivas y una banda sonora. Tengo que decir supongo que en su momento causó impresión ver al actor conocido por el personaje de Superman postrado en una silla de ruedas pero realmente la persona fue un héroe más allá del cine, donde hizo papeles en “Lo que queda del día” por ejemplo, más allá de su popular personaje. Aparte del propio C. Reeve, el film cuenta con la presencia de figuras como Robin Williams, Glenn Close, Woopi Goldberg, Susan Sarandon y Jeff Daniels y se pudo ver en el último festival de Sitges.
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