El guionista y director Jeff Nichols ha tardado años en volver a dirigir un largometraje desde “Loving” de 2016. Ambientado en los años sesenta, sigue el ascenso de un club de motoristas del medio oeste, "Los Vándalps”. El club pasa, en el transcurso de una década, de ser un lugar de reunión para forasteros locales a convertirse en una banda más siniestra, que amenaza el modo de vida único del grupo original. Esta adaptación del libro de Danny Lyon es un drama estadounidense en forma de oda a las bandas de moteros de los años sesenta en que todavía hubo cierta rebeldía romántico en un tipo de vida violenta. La película tiene una lograda ambientación de la época, está bien rodada e interpretada por un estupendo reparto de actores formado por Austin Butler, una destacada Jodie Comer como el único personaje femenino de peso con cordura y sensatez y un adecuado Tom Hardy que parecía nacido para este tipo de papel, además de contar con Michael Shannon, Mike Faist, Boyd Holbrook y Norman Reedus. El film se presentó el año pasado en el festival de Telluride pero no estuvo en la temporada de premios y aunque no es redondo es una de las propuestas más interesantes para ver en el cine.
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