Otro estreno estadounidense del fin de semana pasado es el dirigido por Emma Tammi que ya se encargó de la anterior “Five nights at Freddy’s (2023). Ha transcurrido un año desde la pesadilla sobrenatural en la pizzería de Freddy Fazbear. La historia de lo que ocurrió allí ha ido adquiriendo la talla de leyenda local, e incluso ha dado pie al primer “Faszfest”. El exguarda de seguridad Mike y la agente de policía Vanessa han ocultado la verdad a Abby, la hermana de once años de Mike, acerca del destino de sus amigos animatrónicos. Pero cuando Abby decide reconectar con Freddy, Bonnie, Chica y Foxy, desatará una serie de acontecimientos aterradores que revelarán oscuros secretos sobre el verdadero origen de Freddy’s, desencadenando un horror que llevaba décadas escondido y olvidado. Relacionada con el videojuego homónimo, esta pasable cinta de terror con variedad de grandes figuras animatrónicas de animales y gigantes robots de plástico como villanos es una secuela que sigue la línea de la anterior, cuenta una historia enrevesada de fondo, la trama resulta desordenada y la propuesta no da miedo al espectador aunque tiene algún buen momento. La película vuelve a estar interpretada por Josh Hutcherson, Piper Rubio, Elizabeth Lail, Matthew Lillard y cuenta con Skeet Ulrich. Da la sensación que la propuesta parece de eslabón entre la primera y una posible tercera y última entrega. El filme ha logrado la segunda posición en la taquilla española en su estreno y el primer puesto en los cines estadounidenses.

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