Paterson * * * *

Este año el interesante director de cine independiente estadounidense Jim Jarmusch presentó dos películas: una de ellas fue el documental "Gimme danger" que se estrenó hace semanas y desde hace pocas semanas podemos disfrutar en salas de cine del filme que nos ocupa. Paterson es un joven que trabaja como conductor de autobús en Paterson (Nueva Jersey), la ciudad donde nació Lou Costello y Allen Ginsberg. Cada día, el hombre despierta, temprano, junto a su amada Laura sin necesidad de utilizar despertador. Se entrega a una rutinaria y discreta existencia que tiene como contrapunto su compromiso diario con la escritura de unos poemas sobre su visión del mundo. La película es un encantador drama que describe la vida cotidiana de una persona corriente con un enfoque poético, el director logra que el espectador valore los detalles aparentemente simples que nos pueden hacer feliz, como por ejemplo tener un perro en casa. Vemos en pantalla versos que escribe Paterson y así, se nos presenta el proceso creativo de un poeta que no quiere que su obra se vea expuesto por el público. Cabe decir que la realización sobria del film no casa muy bien con el lirismo de imágenes de la naturaleza pero esta también es una película de aire romántico, sobre una pareja en que los dos tienen un carácter diferente (él, introspectivo, ella, habladora) pero son dos seres creativos a su manera (él, hacia dentro en una libreta secreta, ella hacia fuera pintando o cocinando cup-cakes). La pareja protagonista está muy bien interpretada por una parte por Adam Driver (que empezó a ser conocido por su premio en la Mostra de Venecia por el film italiano "Hungry hearts" y que se está haciendo un hueco en Estados Unidos demostrando su versatilidad, ya que fue el villano de "Star Wars: el despertar de la fuerza"); por otra parte, Golshifteh Farahani, tiene una interesante carrera internacional con títulos como "Red de mentiras" y "La piedra de la paciencia". Además, los personajes secundarios son relevantes, con el hombre del bar que frecuenta el protagonista por la noche, donde hay la pareja que discute que funciona como contrapunto a la feliz pareja principal y, por supuesto, el perro Marvin, que ganó la Palma Dog por su actuación en el festival de Cannes, donde bien hubiera merecido la película ganar el máximo premio. A priori, la ciudad que da título al film no parece muy bonita o turística pero gracias a la realización cálida de Jarmusch nos apetece incluso estar por sus calles o zonas verdes. Cabe apuntar que hay puntos de humor sutiles, a cargo algunos del perro de la casa, en una película sencilla, profunda, minimalista y singular, una de las mejores de su director. El film fue premiado como mejor actor por los críticos de los Ángeles y fue nominada a los premios Gotham a mejor película, guion y actor, pero no está en la carrera de los Oscar; no le hace falta para distinguirse como uno de los mejores títulos a destacar de 2016.

Valoración: 9

Lo mejor: la habilidad de Jarmusch por dignificar y poetizar la realidad cotidiana, y las interpretaciones de la pareja protagonista.

Lo peor: que a algunos les parezca un poco lenta.