Una batalla tras otra * * * *

¡Viva la revolución!

  Después de “Licorice pizza” Paul Thomas Anderson ha escrito y dirigido este largometraje que se estrenó en cines a finales de septiembre. Pat es un hombre que, junto a su pareja Perfidia, forman parte del French 75, un grupo revolucionario radical que lucha por los derechos civiles en Estados Unidos. El coronel Lockjaw, máximo enemigo de la banda, se obsesiona con la mujer del protagonista. El ex revolucionario, tras años apartado de la lucha, se ve obligado a volver a la acción para enfrentar a viejos enemigos en un ambiente cargado de tensión política, racismo y violencia militar...

El proyecto está inspirado en la novela 'Vineland' de Thomas Pynchon (1990), sobre los movimientos radicales de los años sesenta, autor del que Anderson ya adaptó la novela “Puro vicio”. En la filmografía del director ha hablado de la historia de Estados Unidos como los años treinta del siglo XX en “Pozos de ambición”, los años cincuenta en “The master”, los años setenta en “Licorice pizza” y en el título que nos ocupa en la actualidad aunque no hay referencias exactas a este tiempo convulso en que vivimos. La enérgica película combina bien varios géneros como el thriller de acción y la comedia irónica, tiene un trasfondo de crítica política sobre la inmigración ilegal, el terrorismo y la delincuencia, hay una potente primera parte antes de que la acción se traslade dieciséis años después, cuenta con logradas escenas de persecución y siempre mantiene la atención hasta el final aunque el metraje excede a las dos horas y media, en parte gracias a la labor del montaje. También cabe señalar la música compuesta por Jonny Greenwood aunque es un poco invasiva en algunos momentos, la fotografía en formato Vistavision que da fisicidad a las imágenes y el trabajo de maquillaje en dos épocas distintas. Se nota que el director siente cariño por los personajes: Leonardo DiCaprio como el protagonista, que puede recordar al de “El gran Lebowski” en un personaje con cierto patetismo, Sean Penn como el villano de la función, Chase Infiniti (en la miniserie “Presunto inocente”) como la hija de Bob, Benicio del Toro como un amigo de Bob, Teyana Taylor (“Mil uno”) como Perfidia (responsable de una imagen icónica) y Regina Hall como una integrante de la banda.

Quizás “Una batalla tras otra”es la propuesta más accesible para el gran público en la trayectoria de P. T. Anderson, es la gran favorita en la próxima temporada de premios y me alegraría que por fin fuese premiada una película del director en los Oscar.

Valoración: 8’5

Lo mejor: la primera parte, las actuaciones de DiCaprio, Penn y Taylor y el montaje.

Lo peor: el guion es menos profundo de lo que parece.

 

El anclaje emocional de la historia es la relación entre Bob y su hija Willa pero después de la primera parte apenas les vemos juntos antes de que se separen.