Festival de SARAJEVO 2025:

 

  Como es habitual en estas fechas veraniegas, entre los días 15 y 22 de agosto se celebró una nueva edición del festival internacional de cine de Sarajevo. Este año los actores Willem Dafoe, Ray Winstone y Stellan Skarsgaard recibieron el Corazón de Sarajevo de honor por sus trayectorias. 

 

En primer lugar, en la sección oficial de ficción se presentaron títulos como Otter, DJ Ahmet y Stars of little importance, entre otros, mientras que fuera de competición estuvo Man of the house.

En segundo término, en la competición de documentales hubo films como Third world, A saw a ‘Suno’, In hell with Ivo, Bosnian night, Cuba & Alaska y My dad’s lessons, y ya fuera de competición estuvo Oho film.

En esta trigésima primera edición el director Sergei Loznitsa fue el presidente del jurado de la sección oficial que otorgó a la coproducción serbia “Wind, talk to me” de Stefan Djordjevic el Corazón Sarajevo a la mejor película. El premio especial del jurado fue para Lila Koss por la película "Eraserhead in a Knitted Checker". También el film “Creo que el retrato me salvó" del director Alban Muja obtuvo un reconocimiento especial del jurado. 

 

Por su parte, ganó como mejor cortometraje “Winter in March” de Natalia Mirzoyan y “The men’s land” de Mariam Bakacho Khatchvani se llevó el premio al mejor cortometraje documental. Además, “Tarik” de Adem Tuti fue reconocida como mejor película estudiantil y el premio especial para la Promoción de la Igualdad de Género se concedió a Hana Jušić por la película “Dios no ayudará”.

Seguidamente, destacamos los siguientes títulos que formaron parte en diferentes secciones de esta edición del festival de Sarajevo:

 

The pavilion

Este año inauguró el certamen el tercer trabajo dirigido por Dino Mustafic. Esta coproducción bosnia es una comedia ácida sobre un grupo de pensionistas en una residencia que deciden organizar una revuelta armada. La película tiene crítica social, sátira y risa barata.

Fantasy

Un título señalado que estuvo en la sección oficial es el debut dirigido por Kukla Kesherovic. Presenta la historia sobre la transición a la adultez que aborda el trato social que reciben las jóvenes y las expectativas que esta les impone. La trama se desarrolla en una ciudad industrial imaginaria de Eslovenia, donde residen tres grandes amigas. Un encuentro casual con una joven llamada Fantasy, quien está en proceso de transición de género, cambiará sus vidas para mejor. El tema secundario de la película es el entorno de los inmigrantes, caracterizado por la paradoja entre la aparente asimilación y las presiones de la tradición y el afán de uniformidad. Esta coproducción eslovena es un drama que transmite empatía hacia sus personajes, el film estuvo en la sección Cineasti del presente del último festival de Locarno y en el de Sarajevo  ganó los premio a mejor casting para las actrices Sarah al Saleh, Alina Juhart, Mia Skrbinac y Mina Milovanović. 

 

Sorella di clausura

Después de “Ivana la terrible” que vi en la muestra ArteKino, Ivana Mladenovic ha coescrito y dirigido este largometraje. Liliana tiene 36 años, problemas financieros, y que cree que todas sus preocupaciones desaparecerán si finalmente conoce a la superestrella serbia de la que ha estado enamorada desde que tenía doce años. Vera, una de las supuestas amantes del músico, promete ayudarla, pero la misión resultará más difícil de lo esperado. La historia está ambientada en 2008, cuando Rumanía disfrutaba de los efectos positivos de su entrada en la Unión Europea, pero también cuando la crisis financiera sumió al país en una profunda recesión. Esta coproducción rumana es un drama que se presentó en la sección oficial del reciente festival de Locarno y en el de Sarajevo Ivana Mladenovic fue premiada como mejor dirección. 

 

Yugo Florida

Zoran es un trabajador nocturno con fatiga crónica en un reality show, donde sigue de cerca a los participantes dormidos en unos cincuenta monitores. Su vida incómoda y casi sin sentido, que incluye un compañero de piso fumador de marihuana y una ex novia inaccesible, da un vuelco cuando a su distanciado e insoportable padre le diagnostican una enfermedad terminal. Finalmente, Zoran se compromete a ayudarlo en sus últimas semanas. Inspirada en los últimos siete meses antes de la muerte del padre del cineasta, esta coproducción serbia es un drama triste que cuenta una relación paternofilial por el que  Andrija Kuzmanović se llevó el premio al mejor actor.

 

Militantropos

En el apartado competitivo de no ficción estuvo este largometraje coescrito y realizado por Alina Gorlova (“Esta lluvia nunca cesará”), Simon Mozgovyi en su segundo trabajo e Ielizaveta Smith en su debut. Militantropos capta la condición humana a través de las realidades fracturadas de la invasión rusa de Ucrania. La película reconstruye las vidas cotidianas transformadas por la guerra -los que huyen, los que lo pierden todo y los que se quedan para resistir y luchar- rastreando tanto el instinto de supervivencia como la necesidad de cercanía. En medio de la devastación y la atrocidad, el ser humano es absorbido por la guerra y, a su vez, la guerra se convierte en parte del ser humano. Esta coproducción ucraniana es un valioso documental que tiene planos bellos y otros duros de ver y hay momentos cercanos a un tipo de cine experimental. El film estuvo en la Quincena de realizadores del pasado festival de Cannes. 

 

Divia

Otro título de una temática parecida al anterior es el segundo trabajo escrito y realizado por Dmytro Hreshko. La película explora la catastrófica influencia de la invasión rusa en la naturaleza de Ucrania. Es un viaje de la vida armoniosa de la naturaleza al ardiente torbellino de la guerra que calcina la tierra, los bosques y toda la carne. Al llegar la primavera, la naturaleza revive y da nueva vida a los animales a pesar de los daños irreversibles. Sin embargo, el tremendo alcance de la tragedia nos priva de la esperanza de una recuperación natural inmediata y de la limpieza de los restos de la guerra. Esta coproducción ucraniana es un largometraje de no ficción inmersivo y sin diálogos que estuvo en el pasado certamen de Karlovy Vary. 

 

Tata

El título que nos ocupa es el dirigido por Radu Ciorniciuc después de su debut con “Mi casa” y Lina Vdovii (también guionista) en su primer trabajo. Una periodista distanciada de su violento padre descubre que éste se ha convertido en víctima de la explotación laboral. Cuando ella acepta ayudarle a denunciar la injusticia, se reabren las heridas de su pasado. Este documental rumano sobre los traumas y abusos transgeneracionales resulta denso y sin florituras. El film se vio en la sección Docs del festival de Toronto del año pasado.  

 

Our time will come

Hay que señalar el primer largometraje escrito y dirigido por Ivette Löcker. Una austriaca y un gambiano afrontan los retos de su romance intercultural en Viena. A pesar de los obstáculos, se esfuerzan por construir una relación y una familia duraderas, salvando las distancias entre dos continentes y culturas. Esta película austriaca pasó por la sección Forum de la pasada Berlinale y ganó el premio al mejor documental en el certamen de Sarajevo. 

 

9-Month Contract

No está de más apuntar este título realizado por Keteva Vashagashvili en su debut. Una madre georgiana recurre a la subrogación con tal de asegurar un techo para su hija. Lo que comienza siendo una forma rápida de ganar dinero, acaba convirtiéndose en un profundo sacrificio que empuja su cuerpo hasta el límite a través de múltiples embarazos. A medida que su salud empeora, su hija adolescente le planta cara cuestionando el coste de sus decisiones y hasta dónde puede llegar una madre. Este largometraje de no ficción es una coproducción georgiana sobre la maternidad y la relación materno filial. El film se vio en el pasado certamen Docs de Barcelona donde ya lo destacamos y estará en el Marché du film del festival de Cannes del año que viene. 

 

Whites wash of ninety

Por último, podemos señalar este título escrito y dirigido por Marko Nabersnik que debutó hace años con “Rooster’s breakfast”, En los años ochenta, la vida de la joven Bronja cambia cuando su madre muere de cáncer. Tras una infancia marcada por esta pérdida, su vida se ve nuevamente interrumpida por sucesos trágicos, que supera con optimismo. Esta coproducción eslovena es una comedia dramática familiar que estuvo en el apartado Open air de esta edición del festival de Sarajevo.