Después de la miniserie “Harry Palmer: el expediente Ipcress”, James Watkins ha vuelto al cine de terror (“La mujer de negro”) con este título que ha coescrito y dirigido. Cuando una familia americana es invitada a pasar el fin de semana en la idílica finca de una encantadora familia británica con la que entablaron amistad durante las vacaciones, lo que comienza como unas vacaciones de ensueño pronto se convierte en una pesadilla psicológica. Este remake estadounidense del título danés “Speak no evil” (2022) producido por Blumhouse es un thriller de terror espeluznante en forma de fábula sobre hasta dónde podemos llegar para seguir las convenciones sociales que tiene un estupendo primer acto y el tercero resulta violento y algo confuso. Mientras que la película original era más truculenta, la que nos ocupa es más juguetona. Está bien interpretada por un cuarteto de actores formado por un sensacional James McAvoy, Mackenzie Davis, Scoot McNairy y Aisling Franciosi (“Stopmotion”).
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