En la cartelera se han estrenado varios títulos españoles. Uno de ellos es el escrito y dirigido por Kike Narcea años después de “El tiempo de Plácido Meana”. Gabriel es un exboxeador que vive en una aldea retirada de la ciudad junto a su padre y a su perro, Pepe. Todo el mundo le conoce con el apodo de Tarado, el cual se ganó en sus tiempos como púgil y, aunque todavía podría boxear, prefiere llevar una vida tranquila lejos de todo lo que le llevó a pasar unos años en prisión. Para ello ha tomado varias decisiones, ha roto con su pasado y está dispuesto a llevar una vida normal, y más ahora que acaba de recibir la noticia que su régimen de libertad vigilada ha concluido. Pero los viejos fantasmas siempre vuelven, y el regreso a su vida de una vieja conocida, los chanchullos del pasado de Tino, su padre, y la inesperada aparición de su hermano Tinín junto a su nueva novia, Estefa, hace que no se pueda despedir de todo aquello que le hizo pasar un tiempo en varias cárceles del país. Tarado tendrá que lidiar con la situación para intentar poner las cosas en su sitio, y qué mejor manera de hacerlo que usando lo que mejor sabe hacer, pelear. Este es un thriller de acción con toques de comedia de serie B que puede recordar “Airbag”, está realizada con pocos recursos pero con cariño y logra el objetivo de que el espectador pase un buen rato entretenido. Está bien protagonizado por Mario Mayo (corto “Amandine”) y el reparto cuenta con actores como Raúl Jiménez y Fernando Gil. El film ganó el premio a mejor película en la sección Midnight X-treme del festival de Sitges del año pasado.
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