Dos años después de “La maternal” Pilar Palomero ha coescrito y dirigido su tercer largometraje inspirado en el relato “inspirada en el relato 'Un corazón demasiado grande' de Eider Rodríguez. La vida de Isabel da un inesperado giro el día en que su hija Madalen le pide que visite regularmente a Ramón, que se encuentra enfermo. Tras quince años alejada de su exmarido, un hombre al que ve como a un desconocido pese a que fueron familia durante años, en Isabel comienzan a reavivarse resentimientos que creía superados. Sin embargo, al acompañar a Ramón en su momento más vulnerable, Isabel conseguirá ver con otros ojos el fracaso que vivieron para centrarse en el presente de su propia vida. Este es un notable drama familiar que supone un viaje a la muerte y el duelo pero que en el fondo habla de la vida y de la necesidad de los cuidados a las personas que lo necesitan. La película es sobria, sutil, luminosa, elegante sin exhibicionismos, tiene planos largos y se sustenta en las excelentes interpretaciones de Patricia López Arnáiz (una de las mejores actrices españolas muy premiada en los últimos años) y Antonio de la Torre en un sorprendente papel, bien acompañados de la joven Marina Guerola y Julián López apartado del registro de comedia. La producción se rodó en Horta de San Joan en Tarragona donde la directora vivió unos años y supone un salto de madurez y adelante en su trayectoria. El film obtuvo la Concha de plata a mejor interpretación protagonista para López Arnáiz y espero que esté presente en los próximos premios nacionales como uno de los títulos más destacados del año.
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