Raramente desde
Afganistán, nos llega este notable drama que nos acerca a la vida
casera y familiar de una mujer en Oriente Medio. Su principal baza se
encuentra en la gran interpretación de su actriz protagonista G.
Farahani. Además, su arriesgada propuesta de constar de un único
escenario, aunque a algunos les resulte pesada, consigue que nos
metamos en la historia y llegue a tocar el corazón del espectador.
Galardonada en el último festival de Gijón con el premio a la mejor
actriz, FIPRESCI y del jurado joven, para algunos puede ser
irregular, pero es una interesante muestra de cine de autor
proveniente de un país del que a veces no somos conscientes de su
realidad.
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