El
certamen que muestra algunas de las producciones latinoamericanas de
las que luego se dará que hablar en festivales más famosos, como el
caso de la reciente "El último Elvis", llega a su edición
número veinte con un público fiel y demostrando su buena salud en
materia de films interesantes tanto en la sección oficial como en
documentales o cortometrajes.
El
miércoles día 9 tuve la oportunidad de ver el corto "El
nadador" * * *, realizado por la excelente cantera de la
ESCAC. Dirigido por Dani de la Orden (Barcelona, nit d'estiu), esta
es una amable historia entre un chaval al que le gusta una chica que
no lo sabe. En algunos momentos, el espectador queda desconcertado
por saber cuál es el estado de salud del protagonista y, al final,
con una sonrisa. Seguidamente, pudimos apreciar el
film venezolano "Esclavo de Dios" * * * *, que
cuenta una potente historia sobre un árabe terrorista suicida
buscado por un judío agente de seguridad. Sorprende su aplomo al
tratarse de una ópera prima, si bien en algún momento el espectador
no sabe muy bien qué sucede, pero ha destacado en la Mostra en la
que justamente ha sido premiada como la mejor primera película,
dirigida por Joel Novoa y con el premio del público. Es cierto que
los asistentes a los pases quedaron satisfechos con este thriller,
algo a lo que seguramente contribuyó la presencia del actor
protagonista, latino bien caracterizado como islámico.
El
jueves 10 empezó la jornada con el cortometraje "Perdona
nuestras ofensas" * * *, que con vistosidad en la
realización, cuenta una dura historia entre un hijo y una madre que
no puede valerse por sí misma. Puede hacer que los asistentes se
sientan identificados con el tema familiar que trata.
Después, asistimos al pase de la película argentina "La
reconstrucción" * * * * premio FIPRESCI en la pasada
Seminci de Valladolid. Dirigida por Juan Taratatuto, tras comedias
ligeras, ha realizado una propuesta dramática argentina interesante
sobre cómo abrir la caja del dolor que podemos guardar en nuestro
interior. Protagonizada por el conocido Diego Peretti, que bien
podría haberse alzado como el mejor actor de esta edición, en su
parte final deja un alivio en una historia seca contada con realismo.
Más tarde, tuve el agrado de ver el premiado corto
"La gallina" * * * *, producido por Escándalo Films
y dirigido por Manel Raga. Es un excelente film que te deja extraño,
algo desconcertado, a lo que contribuye el blanco y negro o la
interpretación de la conocida actriz Sílvia Sabaté (El cor de la
ciutat"). Ganador del Gaudí, hubiera merecido estar como
finalista en los Goya.
Por último, me resultó especialmente
interesante "María y el Araña" * * * * *, un
emotivo drama argentino dirigido por María Victoria Menis sobre el
primer amor adolescente como bálsamo para un duro asunto familiar,
en que se trata con sutileza la violencia y el embarazo inesperado de
una niña de 13 años. Protagonizada por la pareja de jóvenes
Florencia Salas y Diego Vegezzi y bien acompañados por la abuela y su pareja, es una propuesta que cala hondo en
el espectador y que mereció el premio Radio Exterior de España de
la Mostra.
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