A diferencia de "El
lado bueno de las cosas", entre las finalistas a mejor película
es justo que esté presente el gran debut del joven director Behn
Zeitlin, la cuota de cine independiente norteamericano. Ambientada en
el sur del estado de Luisiana donde las aguas suben vertiginosamente,
esta es una historia de realismo mágico entre una niña y su padre.
Es una propuesta libre, intensa, con toques de lirismo poético que a
algunos quizás no les guste, pero no hay duda que estamos ante un
film particular, bello y sorpresivo, protagonizado con espontaneidad
y naturalismo por Quvenzhané Wallis, de nueve años, la actriz más
joven nominada al Oscar, que cuando lo rodó sólo tenía seis.
Además, se agradece que no caiga en la miseria del contexto en que
está enmarcado y su vitalismo, relacionado el ser humano formando un
todo con la naturaleza. En definitiva, ésta no tan sólo es el mejor
estreno de la semana, sino también una de las mejores películas de
la temporada. Recomendada para los espectadores que quieran ver
propuestas diferentes.
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