El otro gran estreno italiano de la
semana es la última película de Paolo Sorrentino tras la aclamada y
oscarizada "La gran belleza". En la línea de su
predecesora, el filme se centra en Fred Ballinger un director de
orquesta que está de vacaciones en un hotel de los Alpes con su hija
y un amigo director de cine, al que le cuesta acabar su última
película. Fred ha renunciado a su trayectoria musical pero al hotel
llega un emisario de la reina Isabel de Inglaterra para convencerlo
de dirigir un concierto en el palacio de Buckingham. La película
habla del arte, del irreversible paso del tiempo y de la pérdida de
la juventud del título, de personas mayores que miran embelesadas
cuerpos jóvenes que ya no podrán tener. Como es habitual en el
cine, presenta una serie de contrastes que funcionan: vejez frente a
juventud, fealdad frente a belleza, tristeza y luminosidad.
Sorrentino vuelve a demostrar en la realización su talento de voz
autoral y si uno de se deja llevar por la magia de la pantalla de
cine le gustará y puede tocar la emoción. Sin embargo, da la
sensación que el carácter lúdico hace que parezca una propuesta
menor en trascendencia que la anterior y esta vez, a diferencia de en
"La gran belleza", la forma y el contenido no casan tanto.
Si en aquella había arrebatos que fascinaban al espectador, en "La
juventud" se nota un poco la ampulosidad y artificio del estilo
del director, como si mostrara su autoindulgencia. Sin embargo,
cuenta con un atractivo reparto de actores: Michael Caine como el
director de orquesta hace una de sus mejores últimas
interpretaciones, Harvey keitel como su amigo también hace un gran
trabajo y verlos actuar juntos es excelente. Les acompañan Rachel
Weisz como la hija del primero, Paul Dano como un contrapunto más
joven y la veterana Jane Fonda en un pequeño papel un poco
sobreactuada. En definitiva, "La juventud" es una obra
bella, con momentos brillantes pero no es redonda. Encuentro un poco
excesivo que el filme fuera la triunfadora en los pasados premios del
cine europeo, incluyendo los galardones a mejor película y director,
pero ojalá hubiera más estrenos de autor y que llegan al gran
público como éste.
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