jueves, 8 de octubre de 2020

Festival de SAN SEBASTIÁN 2020:

En un intenso mes de septiembre de festivales, cabe señalar que entre los días 10 y 20 se celebró una nueva edición de la muestra Fire!! de cine gay y lésbico de Barcelona que tuvo que aplazarse por la pandemia. Recibió el premio del público la coproducción eslovaca “Let there be light” de Marko Skop y obtuvo el premio a mejor largometraje la coproducción francesa “C’est ça l’amour” de Claire Burger. 

 


Como es habitual, a finales de septiembre ha tenido lugar entre los días 18 y 26 en la bella capital donostiarra la edición número 68 del festival de cine internacional, cuya sede central es el teatro del Kursaal, demostrando profesionalidad, ejemplaridad y eficacia en este tiempo de pandemia, con estrictas medidas de prevención y aforos en las sesiones al 50%.

Este año no han pasado por el festival vasco muchas estrellas del cine pero sí algunas como Johnny Deep, Matt Dillon, y el merecido ganar del premio Donostia de esta edición para el actor y director Viggo Mortensen, que presentó su ópera prima “Falling” (que clausuró el pasado festival de Sundance y se estrena a inicios de octubre en España). 

 


En la sección oficial formaron parte títulos como el francés “Verano del 85” de François Ozon (que se estrena a principios de octubre), el japonés “Any crubabies around?” de Takuma Sato, que obtuvo el premio a mejor fotografía, y varios títulos con producción española como la coproducción española “Rifkin’s festival” de Woody Allen que inauguró el certamen con las actrices Elena Anaya y Gina Gershon, la coproducción “Akelarre” de Pablo Agüero, el documental “Courtroom 3H” de Antonio Méndez Esparza (films que se estrenan a primeros de octubre), así como fuera de concurso las miniseries de TV “Patria” de Aitor Gabilondo (estreno a finales de septiembre en HBO)  y “Antidisturbios” de Rodrigo Sorogoyen e Isabel Peña. También se presentaron fuera de competición el documental mexicano “El gran Fellowe” de Matt Dillon y la miniserie italiana “We are who we are” de Luca Guadagnino, presidente del jurado de la sección oficial.

Precisamente, el jurado de esta edición se atrevió a premiar con creces a la película quizás más atrevida de la sección a concurso, que fue muy bien recibida por la crítica: la georgiana “Beginning” de Dea Kulumbegashvili. Sin embargo, a diferencia de en ediciones anteriores, en un año con un buen nivel en el apartado más importante del festival (si bien en parte a los films con sello de Cannes) el jurado podría haber repartido más los galardones en varios films, como por ejemplo conceder la Concha de plata a la mejor actriz a nombres como Laetitia Dosch o Romina Escobar. Así pues, considero un tanto excesivo que recibiera varios premios importantes “Beginning”, un hecho sin precedentes recientemente, ya que “Magical girl” ganó la Concha de oro y la de plata a mejor director. Además, desde hace muchos años, un intérprete español o hispano no recibía la Concha de plata en sus categorías, ya que era habitual que la actriz o actor que ganaba en san Sebastián, luego alzase el Goya o fuera candidato, algo que no ha ocurrido este año más incierto, ya que este festival marcaba la pauta de cara a la próxima temporada de premios. 

 


En cuanto a otros premios importantes del palmarés, cabe mencionar el premio Horizontes latinos a mejor película iberoamericana y el premio de la Cooperación española a la mexicana “Sin señas particulares” de Fernanda Valadez (que ya fue premiada en el festival de Sundance) en una sección de un nivel por debajo de los últimos años, y el film británico “El padre” de Florian Zeller recibió el premio del público (con la nota más alta tras superar el récord del año pasado con “Especiales”) tras su paso por Sundance y Toronto.

Además, fuera de la sección oficial, se presentaron otros títulos españoles o latinoamericanos como “Ane” de David P. Sañudo que obtuvo el premio Irizar al Cine vasco y pone en ruta a su actriz Patricia López Arnaiz hacia los Goya; el documental chileno “Visión nocturna” de Carolina Moscoso, el documental culinario español “La receta del equilibrio” de Óscar Bernàcer, el español “Sentimental” de Cesc  Gay (estreno a finales de octubre),  el español “Explota explota” de Nacho Álvarez (estreno a inicios de octubre),  el  también español “Un efecto óptico” de Juan Cavestany, el documental español “Camí lliure” de Angel Parra, y el film de episodios argentino “Edición ilimitada” de Edgardo Cozarinsky, Santiago Loza, Romina Paula y Virginia Cosin.

Algunos largometrajes internacionales que se pudieron ver en el certamen son el portugués “Simon Chama” de Marta Sousa Ribeiro, el ruso “Chupacabra” de Grigory Kolomytsev, el chino “The calming” de Qi Xi, o el japonés “Along the sea” de Akio Fujimoto.

En el apartado de Nuevos directores se presentaron films como el chino “Slow singing” de Dong Xingyi (que obtuvo una mención especial), el polaco “I never cry” de Piotr Domalewski o el español “Campanadas a muerto” de Imanol Rayo.

Procedente de otros festivales internacionales se proyectaron títulos como el surcoreano “The woman who ran” de Hong Sang-soo (mención especial) en la sección Zabaltegi Tabakalera, el argentino “El prófugo” de Natalia Meta, el taiwanés “Days” de Tsai Ming-liang, el estadounidense “Nunca, casi nunca, a veces, siempre” de Eliza Hittman (que obtuvo el premio TVE Otra mirada y se ha estrenado a finales de septiembre) procedentes de Berlín; de la Mostra de Venecia, por ejemplo, “Selva trágica” de Yulene Olaizola, de Sundance el irlandés “Volver a empezar” de Phyllida Lloyd (está previsto su estreno en noviembre, el brasileño “Todos os mortos” de Caetano Gotardo y Marco Dutra que se pudo ver en Berlín, el francés “The salt of tears” de Philippe Garrel también de la Berlinale, y del certamen de Rotterdam “Moving on” de Yoon Dan-bi. También, en la sección Perlas, se pudieron ver de Cannes el francés “ADN” de Maïween, el estadounidense “The world to come” de Mona Fastvold de Venecia, el mexicano “Nuevo orden” de Michel Franco también procedente de la Mostra italiana, tras ganar en Venecia y Toronto el estadounidense “Nomadland” de Chloe Zhao  y tras pasar por  Venecia,  la película sorpresa del final del certamen fue “Sportin’ life” de Abel Ferrara

Seguidamente vamos a destacar algunos films que formaron parte de esta edición del Zinbemaldia, sobre todo de la sección oficial y de otros apartados:

Dasatskisi (Beginning)

Uno de los títulos más relevantes de la sección oficial es la asombrosa ópera prima coescrita y dirigida por Dea Kulumbegashvili. En un tranquilo pueblo de provincias, una comunidad de Testigos de Jehová es atacada por un grupo extremista. En pleno conflicto, el mundo de Yana, la esposa del líder de la comunidad, se desmorona lentamente. La insatisfacción interior de Yana crece mientras lucha por encontrar sentido a sus deseos. Esta coproducción georgiana es un atrevido drama religioso compuesto de largos planos fijos que fue muy bien recibido por la crítica en general y fue el más galardonado con cuatro premios importantes: la preciada Concha de oro a mejor película, la Concha de plata a mejor dirección, guion para Dea Kulumbegashvili, Rati Oneli y la Concha de plata a mejor actriz para Ia Sukhitashvili. El film con sello de Cannes ya obtuvo el premio FIPRESCI en el festival de Toronto.

 


Nosotros nunca moriremos

Después de del documental  “Crespo (La continuidad de la memoria)” el coguionista y director Eduardo Crespo  presentó en Donostia este largometraje. Rodrigo y su madre viajan al pueblo donde acaba de morir su hermano mayor. En ese lugar calmo, transitarán los primeros tiempos del duelo. Rodrigo se irá asomando al dolor de los adultos y de manera imperceptible irá dejando la infancia. Su madre intentará revelar los misterios de esa muerte. Se trata de una  película diáfana, con melancolía y un leve humor, con personajes solitarios que intentan brindar algo de afecto. Cuenta una historia suspendida en el tiempo, en la flotación de los lugares perdidos de provincia. Este es un bello drama en forma de road-movie bien protagonizado por la intérprete transgénero Romina Escobar, que sonó para ganar la Concha de plata a mejor actriz. 


 

Druk (Another round)

El coguionista y cineasta Thomas Vinterberg, tras “La comuna” y “Kursk” ha dirigido este proyecto. Cuatro profesores se embarcan en un experimento sociológico en el que cada uno de ellos deberá mantener la tasa de alcohol en su cuerpo al mismo nivel durante su vida diaria, intentando demostrar que de esa manera pueden mejorar en todos los aspectos de su vida. Pero las consecuencias del experimento les cambiarán para siempre. Esta es una tragicomedia que se vuelve más conservadora de lo que parece, que fue recibida de manera irregular por la crítica pero no hay duda de la estupenda actuación del actor fetiche del director, Mads Mikkelsen, que ganó junto con sus compañeros de reparto Thomas Bo Larsen, Magnus Millang y Lars Ranthe la Concha de plata a mejores actores. Además, paradójicamente, el film  con sello de Cannes obtuvo el premio Feroz de la Crítica y está previsto que se estrene pronto en España. 


 

Passion simple

Otro título que no pudo verse en el festival de Cannes y que estuvo en la sección oficial del festival donostiarra es el dirigido por Danielle Arbid tras “Peur de rien”, una adaptación de la novela de Arnie Ennaux. Cuenta la historia de un hombre y una mujer que se conocen por casualidad. Él es un diplomático ruso, más joven que ella y casado, y ella es profesora e investigadora. Poco a poco la obsesión mental de la mujer a través del sexo irá creciendo. La coproducción francesa es un drama que llega a ser perturbador y se sostiene por la notable composición de Laetitia Dosch, que tenía opciones de ganar la Concha de plata a mejor actriz. 


 

En la oscuridad (In the dusk)

Después de “Paz en nuestros sueños” y “Frost” el coguionista y director Sarunas Bartas presentó en el Zinemaldia este largometraje. En Lituania en el año 1948, Ounté es un joven de diecinueve años que se une al grupo de partisanos de la resistencia ante la invasión soviética. Esta coproducción lituana es un duro y denso drama no apto para todos los públicos. 


 

True mothers

La cineasta Naomi Kawase, tras la un poco decepcionante “Viaje a Nara” ha coescrito y dirigido esta adaptación de la novela de Mizuki Tsujimura. Después de adoptar, una mujer recibe una llamada de la madre biológica del niño. Tras una larga e insatisfactoria lucha por quedarse embarazada y convencida por una asociación de adopción, Satoko y su marido deciden adoptar a un niño. Años después, su familia se tambalea con la amenaza de Hitari, una chica desconocida que dice ser la madre biológica. Satoko opta por confrontar a Hitari directamente. La película japonesa es un delicado drama sobre la adopción y la maternidad frustrada. Tuvo su premiere en el festival de Toronto, bien hubiera merecido figurar en el palmarés del certamen vasco  y es uno de los últimos trabajos más logrados de la directora. 


 

Supernova

El siguiente título es el Segundo trabajo escrito y dirigido por Harry Macqueen. Sam y Tusker son pareja desde hace veinte años. Viajan a través de Inglaterra en su vieja furgoneta visitando a amigos, familiares y lugares de su pasado. Desde que a Tusker hace dos años le diagnosticaran alzheimer en su fase temprana, el tiempo que pasan juntos es lo más importante que tienen. Estamos ante un pulcro y sensible drama británico sobre el amor y la muerte. La pareja protagonista está formada por unos magníficos Colin Firth y Stanley Tucci que bien hubieran merecido la Concha de plata a mejores actores aunque el jurado quizás prefirió no reconocer a estos intérpretes tan conocidos. 


 

Crock of Gold: A Few Rounds with Shane MacGowan

Otro largometraje británico que formó parte de la sección oficial es el realizado por el veterano Julian Temple, en cuya filmografía hay films de ficción como “Principiantes” y documentales como “At the Max”.  En el que nos atañe, combinando imágenes de archivo inéditas de la banda y de la propia familia de MacGowan, junto con animaciones del ilustrador Ralph Steadman, entre otros, "Crock of Gold" es una celebración del poeta punk irlandés Shane MacGowan, cantante y compositor principal de The Pogues. Producido por Johnny Depp, este es un notable y sincero film de no ficción, eficaz con el material de archivo, que obtuvo el premio especial del jurado, algo poco habitual en este tipo de festivales tratándose de un documental. 


 

Wuhai

En el segundo trabajo escrito y dirigido por Zhou Ziyang, Yang Hua y Miao Wei forman una pareja felizmente casada que vive en Wuhai, una pequeña ciudad rodeada por un asombroso paisaje desértico en Mongolia Interior. Sin embargo, a Yang Hua, el marido, le incomodan las diferencias de nivel económico entre su familia y la de su mujer. Se asocia con su amigo Luo Yu en un negocio de préstamos comerciales, pero desafortunadamente fracasa y se ve ahogado por las deudas. Este es un drama chino de denuncia sobre los extremos capitalistas que tiene una destacada fotografía. 

 


 

Limbo

Fuera de la sección oficial se presentó el segundo trabajo escrito y dirigido por Ben Sharrock tras el español “Pikadero”. La película ofrece una mirada a los refugiados que esperan que se les conceda asilo en una isla escocesa. Se centra en Omar, un joven músico que está harto del peso del laúd de su abuelo, con el que ha cargado desde su país natal. Este es un emotivo  drama de inmigración británico, realizado con cuidado, que cuenta con la actriz Sidse Babett Knudsen y obtuvo el premio TCM de la Juventud en el Zinemaldia. 

 


Gull

El siguiente título es surcoreano, cuyo título original es “Gal-mae-gi” del debutante  Kim Mi-jo que ha escrito y realizado. O-bok, una mujer de 61 años, ha regentado una tienda de mariscos en un mercado de pescado durante décadas. Un día tiene su primer encuentro con los futuros suegros de su hija In-ae. Esa noche, O-bok es violada por Gi-taek. Al principio, finge que no ha pasado nada y trata de seguir con su vida como siempre. Poco después, le confiesa la violación a In-ae. La policía llama a Gi-taek para investigar y la historia del incidente comienza a difundirse por el mercado. Este drama obtuvo una mención especial en el apartado TVE Otra mirada. 


 

Spring blossom

Otra ópera prima que se pudo ver en Donostia es la dirigida por Suzanne Lindon. Suzanne tiene dieciséis años. La gente de su edad le aburre. Cada vez que va al instituto pasa por delante de un teatro. Allí conoce a un hombre mayor que ella que se convierte en su obsesión. Poco a poco se conocen y, a pesar de su diferencia de edad, acaban enamorándose. Pero Suzanne siente que puede perder su vida de adolescente aunque le cueste adaptarse a los de su edad. Este es un provocativo drama de iniciación francés interpretado por la propia Lindon y Arnaud Valois, que viene con el sello de la sección oficial y de Cannes y se preestrenó en el festival de Toronto. 


 

El agente topo

Tras el notable cortometraje “Ya no estoy aquí”, la guionista y directora Mailte Alberdi ha presentado su segundo largometraje. Sergio es un espía chileno, o algo parecido. Al menos, se le ha ofrecido este trabajo después de un casting organizado por el detective Rómulo, un investigador privado que necesita a un topo creíble para infiltrarse en un hogar de retirada. La cliente de Rómulo, una hija de una residente preocupada por el trato que ésta pueda estar recibiendo, sospecha que su madre podría estar siendo maltratada, por lo que le contrata para descubrir qué es exactamente lo que está sucediendo.
Sergio, sin embargo, tiene 83 años y no es precisamente el agente 007, por lo que no resulta nada fácil entrenar a un aprendiz en lo que respecta a la tecnología y a la metodología de espionaje. Sergio sí que es un buen estudiante que busca por todos los medios distracciones para entretenerse tras haber perdido a su mujer.  Mientras trata de recolectar pruebas, Sergio entabla amistad con algunos de los residentes y se da cuenta que la supuesta terrible verdad que buscaba no tiene absolutamente nada que ver con lo que tanto él como Rómulo habían sospechado. Esta coproducción chilena, española y de otros países es un divertido docudrama de espías que ya estuvo en la sección de documentales internacionales del festival de Sundance y recibió el premio del público a la mejor película europea en el de san Sebastián. 


 

A Metamorfose dos Pássaros

Este es otro largometraje de no ficción que supone el debut escrito y dirigido por Catarina Vasconcelos. Beatriz y Henrique se conocen, se enamoran y se casan cuando ella tiene 21 años. Henrique es un oficial de la marina y se embarca en el mar durante una temporada. Beatriz queda a cargo de sus seis hijos en casa. Un día muere de forma totalmente inesperada. Su hijo mayor es Jacinto, que desde la infancia ha soñado con convertirse en un pájaro. Jacinto es el padre de la directora Catarina Vasconcelos, cuya madre también falleció cuando ella tenía 17 años. Tras su muerte, Catarina empezó a trabajar en un proyecto llamado "La metamorfosis de los pájaros". Estamos ante una especie de poético ensayo experimental portugués que se presentó en la sección Encounters de la Berlinale y ganó el premio a mejor película en la sección Zabaltegi-Tabalakera, la más radical del certamen. 


 

The trouble with being born

El siguiente título es el segundo coescrito y realizado por Sandra Wollner después de “The imposible picture”. Elli es una androide y vive con un hombre al que llama padre. Es capaz de rememorar vacaciones y cualquier otra cosa que él programe para que ella recuerde. Durante el día se dejan llevar por el verano y por la noche él la lleva a la cama. Diseñada para asemejarse a uno de sus recuerdos, realmente parece estar viva, a veces incluso parece soñar, y sin embargo no deja de ser una máquina, un contenedor para esos recuerdos que lo son todo para él y nada para ella. Esas evocaciones parecen dominarle, de hecho han llegado a tener vida propia. Una noche ella se interna en el bosque siguiendo un eco evanescente. Se pierde entre los matorrales y alguien la encuentra y se la lleva a su casa, proporcionándole nuevos recuerdos y una nueva identidad. Esta es la historia de una máquina y de los fantasmas que todos llevamos en nuestro interior. Se trata de una inteligente coproducción austriaca de ciencia-ficción que tiene como referentes el mito de Frankestein y el episodio “Ahora mismo vuelvo” de la serie “Black mirror”. El film se pudo ver en el apartado Encounters del festival de Berlín.


 

Las mil y una

Después de debutar con “Hoy partido a las tres” Clarisa Navas ha escrito y dirigido su segundo trabajo. Iris, de diecisiete años, ha sido expulsada de la escuela y pasa los cálidos días y noches con sus dos mejores amigas, sus primas, en habitaciones estrechas, jugando con su teléfono móvil o en las calles vacías de la ciudad. Cuando Renata, fría y segura de sí misma, entra en escena, Iris queda fascinada, y no pasa mucho tiempo antes de que comiencen a coquetear. Pero en la zona, los rumores sobre el pasado de Renata son cada vez más fuertes. Esta coproducción argentina es un logrado drama iniciático y queer que ya estuvo en la sección Panorama de la Berlinale y obtuvo una mención especial en la sección Horizontes latinos del festival vasco. Está previsto su estreno en España a inicios de 2021.


 

Memory house

Desde Brasil se presentó en Donostia el debut en el largometraje escrito y dirigido por João Paulo Miranda Maria. Cuenta la historia de Cristovam, que trabaja en una fábrica de leche en una antigua colonia austríaca en Brasil. Se siente solo, condenado al ostracismo por diferencias culturales y étnicas. Un día, descubre una casa abandonada llena de objetos que le recuerdan a sus orígenes. Es un drama en forma de fábula sobre la sociedad del país que tiene el sello de Cannes y también se pudo ver en Toronto.

 


Yellow cat

Procedente de la Mostra de Venecia se presentó en el Zinemaldia esta coproducción kazaja de del coguionista y cineasta Adilkhan Yerzhanov que el año pasado estuvo en la sección oficial con “A dark-dark man”. Kermek, un ex convicto y su querida novia Eva, quieren dejar atrás su vida criminal en Kazajistán. Él tiene un sueño: construir un cine en las montañas. ¿Podrá el amor que siente Kermek por Alain Delon ser lo suficientemente fuerte como para alejarse definitivamente de las violentas garras de la mafia? Estamos ante un singular film de planteamiento absurda, con un particular humor del país  y que posee su encanto. 


 

La última primavera

La familia Gabarre-Mendoza celebra el cumpleaños de su nieto cuando una inspección policial interrumpe el festejo. En la Cañada Real, un barrio de chabolas a las afueras de Madrid, surgen tensiones entre las autoridades y los vecinos, ya que los terrenos han sido vendidos y las familias son obligadas a abandonar las casas que ellos mismos han construido. Mientras, la madre, Agustina, pasa de ser una mujer muy alegre a vivir atormentada por el miedo; el padre, David, un chatarrero muy trabajador, intenta encontrar una solución, pero la burocracia del sistema les falla. Entretanto, los miembros más jóvenes de la familia -David hijo, la nuera y madre adolescente María y el joven Alejandro- luchan a su manera con sus vidas en la cuerda floja. Tras varios trabajos holandeses, Isabel Lamberti ha coescrito y dirigido este docudrama sobre una comunidad desubicada en que quizás se nota un poco que las situaciones están planteadas a priori. Esta coproducción española ganó el premio a mejor largometraje en la muy interesante sección Nuevos directores. 


 

El olvido que seremos

Para finalizar, después de la interesante “La reina de España” el cineasta Fernando Trueba ha realizado esta adaptación de una novela de Héctor Abad Faciolince a cargo de su hermano David Trueba. Narra de manera íntima la vida de un hombre bueno, el médico Héctor Abad Gómez, carismático líder social y hombre de familia, un destacado médico y activista por los derechos humanos en el Medellín polarizado y violento de los años setenta. La historia relata la vida del doctor, padre de familia preocupado tanto por sus hijos como por los niños de clases menos favorecidas. En su casa se respiraba la vitalidad y la creatividad características de una educación fundamentada en la tolerancia y el amor, pero la tragedia asomaba. Este es un entrañable y hermoso drama biográfico colombiano protagonizado por un magnífico Javier Cámara que supone una de las mejores últimas películas del director y que clausuró esta excepcional pero satisfactoria edición del festival de San Sebastián.

 


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