El siguiente título es el escrito y dirigido por Chaitanya Tamhane años después de “Tribunal”. Sharad Nerulkar ha dedicado su vida a convertirse en vocalista de música clásica india y estudia con diligencia las tradiciones y las disciplinas de los antiguos maestros, de su gurú y de su padre. Pero pasan los años y Sharad comienza a preguntarse si realmente es posible alcanzar la excelencia que añora. “The disciople” ofrece un recorrido por la devoción, la pasión y la búsqueda de lo absoluto en la Bombay contemporánea. Este es un notable drama indio sobre la relación compleja entre el discípulo y su gurú, y añade la historia de una cantante tradicional que Sherad sigue a través de la televisión. La película nos sumerge en la música clásica hindú, tiene un ritmo pausado y puede recordar al cine de S. Ray. El film ganó el año pasado el premio al mejor guion y el FIPRESCI en la Mostra de Venecia, estuvo en la sección oficial de la Seminci de Valladolid y fue nominado al premio Independent Spirit a mejor largometraje extranjero. Es una lástima que no lleguen a los cines propuestas como esta y creo que la plataforma comercial de Netflix donde se ha estrenado a últimos de abril no es la mejor vía para disfrutarla.
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