Por
fin se ha estrenado una de las películas más esperadas de este año,
la cuarta y última entrega de la saga que marcó un hito en la
historia del cine de terror de nuestro país. REC fue un experimento
con un formato innovador que fue un inesperado taquillazo, a la que
siguió una segunda parte en la misma línea aprovechando todo lo que
daba de sí el bloque de pisos donde se produjo la infección. Ambas
fueron dirigidas por Jaume Balagueró ("Mientras duermes")
y Paco Plaza ("Romasanta"). El segundo se hizo cargo
después de una tercera entrega que dio un giro más cómico y ahora
el primero realiza esta película que retoma donde la historia donde
REC 2 finalizó pero de manera más espectacular, con más medios,
ambientada en un barco donde están aislados los infectados y con la
actriz Manuela Velasco de nuevo como protagonista, sin duda el
personaje más destacable de su vida, si bien quizá sea mejor actriz
y más icónica Leticia Dolera en REC 3 Génesis. El estreno que nos
ocupa es una muestra de cine de zombis en alta mar entretenida pero
efectista. Agradezco a Balagueró que intente explicar el origen de
la infección,mostrando su buen hacer en la realización, dando
tensión, algún susto y en concreto en las escenas de acción o en
la de la cocina con el mono. Sin embargo, (y lo lamento porque soy seguidor de la saga) falla en la
dirección de los actores secundarios,.donde encontramos a actores
desconocidos como es habitual en la saga pero también a Héctor
Colomé ("La gran familia española"), Mariano Venancio
("Camino"), Maria Alfonsa Rosso ("Caníbal") o
Críspulo Cabezas ("Barrio"). En definitiva, ésta sería
la peor de la saga, ya que es más de lo que ya ofreció, pero puede
gustar a los seguidores del género y de las otras REC.
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