Después del éxito de la obra
cumbre "Boyhood", que hubiera merecido triunfar en los
Oscar (y más después de ver este año que González Iñárritu
volvió a llevarse la estatuilla), Richard Linklater dirige un filme
que bien podría situarse donde acaba "Boyhood". Jake es un
joven que llega a la universidad de Texas donde en unos días
empezará el curso. Piensa aprovecharlos conociendo a chicas, yendo a
fiestas y haciendo amigos. Esta es una especie de secuela espiritual
de "Dazed and confused", ambientada en los ochenta, en que
los personajes, jugadores de béisbol, son conscientes de las
responsabilidades de la edad adulta, viven el momento presente, vemos
cómo se relacionan entre ellos y las chicas que conocen. Linklater
realiza una obra honesta, con encanto, transparente en su narrativa a
priori desordenada pero firme, que consigue trasladar al espectador
lo que tal vez está cerca de la realidad que el director vivió en
su Texas en la época universitaria. Esta es una comedia nostálgica
de aquellos años, lejos de las típicas comedietas universitarias
estadounidenses, situada en un tiempo concreto pero cuya historia
resulta universal, con unos personajes eficaces bien interpretados
por actores desconocidos; Blake Jenner interpreta al protagonista
Jake, acompañado por Ruan Guzmán, Zoey Deutch, Tyler Hoechlin,
Wyatt Russell, Adriene Mishler y Jonathan Breck. Así pues, estamos
ante otra gran y excelente película de Linklater, junto con la
trilogía "Antes de..." y Boyhood", y puede ser
recomendable verla después de ésta. Además, aquellos que hemos
disfrutado del periodo universitario, tienen un plus para gustarles
mucho el filme.
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