lunes, 19 de diciembre de 2016

La comuna * * *

Después de la apreciable adaptación británica de época de la novela de Thomas Hardy "Lejos del mundanal ruido", Thomas Vinterberg vuelve a una producción danesa tras la nominada al Oscar "La caza". En la Dinamarca de los años setenta, Erik, un profesor de arquitectura, hereda el viejo caserón de su padre al norte de Copenhague. Su esposa Anna, una presentadora de televisión, le propone que inviten a sus amigos a vivir con ellos, con el fin de alejar el aburrimiento que ha empezado a infiltrarse en su matrimonio. Muy pronto, unos cuantos de ellos se instalan en la casa. Se toman decisiones en común, se habla de todo y se discrepa en mayor o menor nivel por sus idiosincrasias. Pero el frágil equilibrio amenaza con romperse cuando Erik se enamora de Emma, una alumna suya, que se muda al caserón. El director se sirve de una experiencia vital que vivió en su niñez, la dinámica de una comuna utópica, para trazar lo que es más importante: las relaciones poco verosímiles entre los personajes y el triángulo amoroso que se establece entre el matrimonio formado por Erik y Anna y la alumna Emma. Si ya en "La caza" algunos vieron una trampa emocional (decir que la he visto dos veces y me ha gustado), en esta ocasión parecen verse mejor los mecanismos para emocionar al espectador. La historia es lacrimógena y la realización es convencional, lejos del riesgo que Vinterberg asumió con el movimiento Dogma en "Celebración" pero con su capacidad narrativa. El filme está bien interpretado por la pareja de actores contrastados en películas danesas como son Ulrich Thomsen ("Hermanos") y Trine Dyrholm ("Amor es todo lo que necesitas"), que coincidieron en la citada "Celebración y en la oscarizada "En un mundo mejor". La interpretación de la actriz es de lo mejor de la película y fue premiada en el festival de cine de Berlín de este año, donde la película no obtuvo muy buenas críticas, además de estar nominada como mejor actriz en los premios del cine europeo, en que el filme fue premiado como mejor montaje. Así pues, personalmente me parece interesante el ambiente en una comuna pero el filme no profundiza en el experimento y queda un filme de estilo más luminoso, no tremendista propio del director pero sí convencional.



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