El faro de las horcas * * *

La filmografía de Gerardo Olivares ha estado muy ligada a poblaciones remotas como la india en su debut con Larry Levene "Una nube sobre Bhopal" en forma de documental, la población africana en "14 kilómetros" (ganadora de la Espiga de oro en la Seminci de Valladolid, y la naturaleza y los animales en "Entre lobos", estas dos películas de ficción. Ahora el director ha estrenado su última película, una coproducción hispano-argentina basada en hechos reales que cuenta la historia de Lola y su hijo autista, Tristán, que viajan lejos a la Patagonia argentina para encontrarse con Beto, un guardafauna que tiene una relación muy especial con las orcas salvajes. El motivo del viaje es que Tristán ha mostrado una extraña empatía y respuesta de estímulos ante la visión de las orcas. La persistente lucha de Lola por la mejora de su hijo, la singular personalidad de Tristán y su relación con la naturaleza hacen que sus vidas cambien. El filme combina el drama de una madre, su hijo y la relación con el guardafauna, y el marco del paisaje natural que consigue hacer desconectar en el espectador de las poblaciones urbanas, filmado con la mirada documental habitual en Gerardo Olivares y con  buenos efectos digitales sobre todo en la interacción entre los personajes y las orcas. En este sentido, es de agradecer que en muchos momentos no haya música ambiental sino simplemente el sonido del viento, el mar o los animales. Sin embargo, la historia dramática entre los personajes no termina de funcionar muy bien, aunque entendemos lo que el niño autista ve. Hay una historia de amor un poco convencional entre los personajes de los notables de la siempre veraz Maribel Verdú y el desconocido y apuesto actor argentino Joaquín Furriel (si bien trasmiten con sólo miradas) pero no me gusta mucho el hecho de que para que la historia abarque el gran público sea obligatoria una relación amorosa. Es una lástima que la historia dramática no esté al nivel del ambiente en que se localiza (rodado en parte en Fuerteventura) pero es una película estimable, que demuestra para los reacios al cine español, que en España se pueden hacer interesantes filmes aparte de thrillers y comedias populares.