Después de juna trayectoria exitosa de obras de teatro, Miguel del Arco debuta en el largometraje con este filme. Marga, una mujer de casi setenta años, anuncia a sus tres hijos que quiere vender la casa de verano familiar para luego hacer un largo y misterioso viaje. Los invita a pasarse por allí lo antes posible para elegir muebles o recuerdos que quieran conservar antes de la venta. Héctor, el hermano mayor, propone aprovechar el mismo fin de semana en el que deshagan la casa entre todos para celebrar en familia su boda con la mujer con la que lleva más de quince años viviendo, y de la que todos esperaban que se separara. Hay muchas películas planteadas en reuniones familiares y esta es una de ellas. El director presenta a los personajes, mezcla momentos dramáticos y cómicos y llega a un clímax intenso. El filme tiene un carácter teatral y algunos momentos de exceso pueden ir en contra de la intensidad de la historia. Del Arco dirige bien a un plantel de actores excepcional, lo más destacado de la cinta, formado por Mercedes Sampietro, José Sacristán, Bárbara Lennie, Carmen Machi, Emma Suárez, Elisabet Gelabert, Gonzalo de Castro y Pere Arquillué. La película inauguró la pasada Seminci de Valladolid y es probable que su director opte a premios como mejor dirección novel.
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