Otro
largometraje francés que podemos encontrar en salas es el de Pierre
Schoeller después de dirigir “Versalles” y “El ejercicio del
poder”. En el año
1789, el pueblo francés entra en revolución. La historia entrecruza
los destinos de mujeres y hombres del pueblo con los de figuras
históricas. Su lugar de encuentro es la recién creada Asamblea
Nacional. En el centro de la historia, la suerte de un rey y el
surgimiento de la República. Este es un drama de época en que el
director intenta ser instructivo sobre la Revolución Francesa en
aspectos políticos y del pueblo y demuestra rigor histórico. Sin
embargo, hay cierta pesadez en la narrativa y el guion es mejorable y
no logra emocionar al espectador. Cuenta con un gran despliegue de
medios y un reparto formado por gran parte de los mejores actores
franceses: Gaspard Ulliel, Louis Garrel, Laurent Lafitte, Adele
Haenel, Denis Lavant, Niels Schneider, Celine Salette, Izia Higelin,
Olivier Gourmet y Noemie Lvovsky. El film se presentó el año pasado
fuera de concurso en la Mostra de Venecia y fue nominado a los
premios César a mejor diseño de producción y vestuario.
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