El español de nacionalidad Marcelo Piñeyro,
director de films como "Kamchatka" o "El método"
dirige con solvencia este drama familiar sobre un niño mulato que en
busca de su verdadero padre, encuentra a su abuela. Esta película
está realizada con elegancia, no es demasiado sensiblera y logra
emocionar y tiene un buen contrapunto de humor, por lo que es el film
más luminoso en la trayectoria del director. Parte de esto viene
dado por el personaje de Belén Rueda, su química con el de Sergi
López o el de Juan Diego Botto. En este sentido, el trabajo actoral
es meritorio: el protagonista Mario Casas hace un papel adulto en la
línea de "Grupo 7", Belén Rueda, a diferencia de la
sufrida madre de sus hijos desaparecidos en "Séptimo", se
encuentra inesperadamente con un nieto y su personaje no padece tanto
y estñan bien secundados por los anteriormente citados. Esta es una
buena propuesta para ver estas fechas navideñas, que puede optar a
los Goya en categorías de interpretación sobretodo.
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