El director de "Los
vengadores" nos sorprende gratamente con esta adaptación de la
obra homónima de Shakespeare que es fiel al original pero diferente
a la que realizó Kenneth Branagh. Se trata de una producción
independiente rodada en blanco y negro en la casa del propio
realizador y con un buen reparto de actores poco conocidos para el
gran público. Esta es una obra que resulta fresca, divertida y cuya
ligereza no está exenta de calidad. Junto con "Gente en
sitios", es el estreno más inventivo de la semana.
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