El director John Carney destacó con el
modesto y sincero film "Once" sobre una pareja de músicos,
que ganó el Oscar a la mejor canción. Tras hacer películas en
Irlanda, el realizador debuta en Hollywood con una historia similar a
la de "Once". Una cantante abandonada por un chico que ha
alcanzado el éxito conoce a un desilusionado productor. Este estreno
consigue utilizar la música para hablar del amor de manera auténtica
y sin sentimentalismos, aunque parece que la naturalidad que tenía
"Once" se ha perdido un poco. Pero es una obra que tiene su
encanto, divertida a veces, que deja con buen gusto al espectador.
Cuenta además con un atractivo reparto de actores: la pareja protagonista tiene buena química, Keira Knightley
demuestra de nuevo que puede hacer papeles interesantes en films que
no sean de época y canta de verdad y Mark Ruffalo está muy metido en
su papel de productor musical (es uno de los actores más versátiles
que puede hacer creíble cualquier papel), acompañados por el
cantante de "Maroon 5" Adam Levine y de Hailee Steinfeld
(nominada al Oscar por "Valor de ley). Estamos ante el mejor
drama romántico de este verano, que gustará a los seguidores del
género y a los que no lo son, como también a los que les gusten los
films con canciones y a los que no.
No hay comentarios:
Publicar un comentario