El
tema de emigrar a otro país para buscar una vida mejor ha sido un
tema recurrente en el cine. En los últimos años tenemos el caso,
por ejemplo, de "El sueño de Ellis" dirigida por James
Gray y protagonizada por Marion Cotillard. Después de títulos pocos
destacados en su filmografía como Intermission" o "Circuito
cerrado", el director John Crowley da un paso adelante en su
trayectoria (después de dirigir capítulos de la segunda temporada
de "True detective"). Crowley trata el tema de la
inmigración pero mientras la película de Gray era un drama más
oscuro y daba una visión dura del asunto, el tratamiento en
"Brooklyn" es diferente. Nick Hornby (autor de la novela
que se llevó a la pantalla grande en "Alta fidelidad" y
responsable de los guiones adaptados de "An education" o
"Alma salvaje") adapta al cine la novela de Colm Toibin. La
mirada del guionista y del director es desde el punto de vista
irlandés, de tono amable y luminoso en que la joven Eilis viaja a
Nueva York en los años cincuenta gracias a la ayuda de la Iglesia
Catolica que le facilita empleo y alojamiento, además de que por el
camino la chica no se encuentra con personajes oscuros que
desestabilicen la nobleza de espíritu y la integridad de la
protagonista. En este sentido el planteamiento puede parecer
demasiado amable y simple pero por suerte el director ofrece al
espectador en un momento dado una cuestión interesante. Cuando Eilis
ha conseguido llevar una buena vida en Brooklyn con su trabajo,
posibilidades de un empleo mejor en el futuro y mantiene una relación
con un joven de origen italiano, debe volver temporalmente a Irlanda
a causa de la muerte de su hermana para acompañar a su madre.
Entonces en su lugar de origen también le empiezan a ir bien las
cosas y uno se pregunta si debe quedarse o regresar a Nueva York: no
hay una buena o mala elección, aunque al espectador le gustaría que
retomara su vida en Brooklyn. Si el film se eleva por encima de la
media, aparte de por el tema que trata es por la convincente
interpretación de Saoirse Ronan. Después de ser nominada al Oscar
siendo aún una niña por "Expiación", la actriz demostró
ser una gran promesa en títulos como "The lovely bones",
"Camino a la libertad", o "Hanna" . Con este
papel de Eilis ha demostrado ser una gran actriz, en una actuación
contenida pero con algunos momentos de desarme emocional. Vemos como
su personaje evoluciona de la inocencia a la madurez gracias a
emigrar y no es la misma chica que regresa después a Irlanda que la
que se fue de allí. Por este trabajo la actriz ha logrado estar fija
en las nominaciones a premios como los Globos de Oro, Bafta y Oscar,
con compañeras de la talla de Cate Blanchett. Además, consiguió el
Satellite award y quizás era la única que pudo hacerle sombra en el
supuesto caso que la favorita Brie Larson no ganara el Oscar. Saoirse
Ronan está bien acompañada por un eficaz reparto de actores que
demuestra el acierto en el casting: el casi desconocido hasta ahora
Emory Cohen como el novio en Brooklyn de la protagonista, Domhall
Gleeson como el joven irlandés que conoce a Eilis tras su regreso y
veteranos como Jim Broadbent como el padre que ayuda a la joven y
Julie Walters.
Esta
propuesta puede resultar académica; es lógico aunque quizás un
poco sobrevalorado que llegara a estar entre las nominadas a a mejor
película en los Oscar, ya que su tono amable es del gusto de los
académicos. Es curioso que Brooklyn esté ambientada en los años
cincuenta (con unas calles muy limpias que no hacen que la
ambientación sea muy creíble, aunque los vestidos sí pueden ser
más de la época). En esta edición de los Oscar, también "Carol"
estaba ambientada en esa época pero los films son muy diferentes
entre sí y el de Todd Haynes sí que hubiera merecido aspirar a
mejor película. Quizás la existencia de "Brooklyn" hizo
que los académicos la eligieran como una propuesta más fácil de
votar, ya que además resulta conservadora. La época en que
transcurre ya ayuda al conservadurismo pero además se puede observar
que la joven empieza a estar bien en Brooklyn gracias a que entabla
una relación con un chico, como si una mujer no pudiera estar bien
por sí misma y parece que siempre necesita la ayuda de otro. Muchos
no perdonaron que la elección del filme en los Oscar fuera en
detrimento de las opciones de "Carol" pero la película de
John Crowley no es nada desdeñable, es un film bien medido e
interesante, que transcurre sin pesadez para el espectador aunque se
le echa en falta más garra dramática (la historia podría haber
ahondado más en el papel de la hermana de Eilis y en su muerte).
Valoración:
7
Lo
mejor: la contenida y honesta interpretación de Saoirse Ronan.
Lo
peor: el tono demasiado amable.
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