El estreno español más
interesante de esta semana que podemos encontrar en la cartelera, más
que la pasable comedia de enredo "Tenemos que hablar" es
este film que se pudo ver en la sección de cine español del pasado
festival de Valladolid. Se trata de un drama dirigido por Norberto
López Amado sobre los recuerdos de la vida pasada de una mujer,
Julia, que va a un hotel de Madrid y se aloja en la misma habitación
en que estuvo hace veinte años y donde vivió algo importante e
imborrable. Este personaje necesitaba ir allí para evocar un
capítulo de su vida en el pasado. Está muy bien interpretado con
convicción y verdad por Marta Belaustegui, en uno de sus papeles más
interesantes, acompañada del actor Fernando Cayo. El trabajo de la
actriz es uno de los mayores logros de un film rodado en blanco y
negro con sobriedad. Aunque el resultado no es redondo, se agradece
encontrar propuestas sensibles con intenciones poéticas que hablan
de la vida de manera existencial. Cabe añadir que la música de
Pedro Navarrete quizás es un poco reincidente pero vale la pena ver
esta pequeña y estimable película.
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