Uno de los estrenos comerciales
más esperados de esta temporada es el largometraje dirigido por David Dobkin,
responsable de “Demasiado profundo” y “El juez”. Lars y Sigrit son dos músicos
islandeses desconocidos que tienen delante la oportunidad de su vida:
representar a su país en el concurso musical más importante del mundo. Ahora
podrán demostrar que hay sueños por los que vale la pena luchar. Esta es una divertida
comedia musical estadounidense que homenajea con respeto pero con tópicos el festival
de Eurovisión, tiene buenos chistes pero también busca la emoción y la banda
sonora es estupenda. La película cuenta con un atractico elenco de intérpretes
compuesto por Will Ferrell (“Downhill”) también coguionista, Rachel McAdams (“Noche
de juegos”), Pierce Brosnan (“Mamma mia: una y otra vez”), Dan Stevens (“La llamada
de lo salvaje”) y la participación de nombres de la música como Demi Lovato,
Conchita Wurst o ABBA. Así pues, esta propuesta disponible en Netflix desde
finales de junio, no es el desastre que parecía a priori y puede gustar a los
seguidores del certamen que no se ha celebrado este año.
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