Los conductos * * *

Tras cortometrajes como “La impresión de una guerra” Camilo Restrepo ha debutado en el largometraje con este título que ha escrito y dirigido. Pinky se ha dado a la fuga. Por la noche, las calles huelen a apocalipsis y la ciudad parece estar en llamas. La droga se arremolina entre las venas y el aire. Tras haberse liberado de las garras de una secta liderada por un tal "padre" y decidido a ser el dueño de su propia suerte, se encierra en una fábrica ilegal de camisas, donde duerme rodeado de pinturas y slogans. Pinky busca la luz al final del túnel, pero los fantasmas le asfixian y no le permiten verla. Huye, pero Colombia arde en llamas. Sin embargo, por suerte para él, el país sigue estando vivo. Esta coproducción colombiana ofrece una mirada poética a la exclusión social y a la desintegración social, es una ópera prima atrevida, sin concesiones mediante un relato fragmentado, una voz en off del propio director y colores vibrantes. Además, cabe destacar la actuación de Luis Felipe Lozano. El film de 2020 ganó el premio a mejor ópera prima en la sección Encounters de la Berlinale y el premio a mejor película iberoamericana en el festival de Mar de Plata.