Otro título de cine europeo, en este caso francés, que se ha estrenado en salas es el dirigido por Sebastien Marnier, cuyo anterior trabajo fue “La última elección”, adaptación de un libro que leí. En el que nos ocupa, una mujer al borde del colapso financiero intenta reconectar con su padre rico y distanciado y su nueva familia. Pero no todo es como parece… Los celos y la amargura rompen a la familia de Stéphane, quien se inventa una vida completamente diferente para impresionar al hombre rico y las mujeres a su alrededor, que la socavan. Estamos ante un aceptable thriller dramático que tiene como referencias el cine de Claude Chabrol y de François Ozon, tiene giros de guión en la segunda parte cercana a los libros de Patricia Highsmith, una ambientación lograda y resulta entretenido y juguetón si bien el conjunto es de trazo grueso. La cinta tiene un buen elenco de intérpretes formado por Laure Calamy, Francis Veber y Suzanne Clément y estuvo el año pasado en la Mostra de Venecia.
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