También podemos encontrar en salas de cine esta propuesta elaborada por Jean-Christopher Roger y Julien Chheng que antes realizaron “Ernest y Celestine, cuentos de invierno”. Ernest y Celestine vuelven al país de Ernest, la Charabie, para poder arreglar su precioso violín estropeado. Entonces, descubren que la música ha sido prohibida en todo el país desde hace años. Para ellos, ¡es imposible vivir sin música! Con la ayuda de sus cómplices, entre los que se encuentra un misterioso justiciero enmascarado, Ernest y Celestine van a intentar poner fin a esta injusticia, para poder traer de nuevo la alegría al país de los osos. Esta secuela del premiado film "Ernest & Celestine" (2012) es una notable pequeña joya francesa de animación en 2D de aventuras que resulta tierna y encantadora y hace una defensa a la tolerancia. La película está realizada con buen gusto, imaginación, destacan las escenas nocturnas con un bello azul marino y es una propuesta que puede gustar a los niños y a los adultos cinéfilos del arte animado.
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