Edward Zwick, director de películas
de envergadura como "Leyendas de pasión", "El último
samurái" o "Diamante de sangre" dirigió este filme
menos espectacular. Se trata de un drama biográfico que cuenta la
historia de la preparación y del legendario enfrentamiento por el
campeonato del mundo entre Bobby Fischer, campeón de ajedrez
norteamericano, y el campeón soviético Boris Spassky. El duelo tuvo
lugar en 1972, en plena Guerra Fría, fue más que unas partidas para
ganar un campeonato, ya que captó la atención a nivel
internacional. El director realiza con pulcritud y corrección este
filme, aunque le falta personalidad. El duelo entre los dos jugadores
fue más allá, ya que fue un ejemplo de las tensiones de la Guerra
Fría y la victoria de Fischer desató la catarsis en Estados Unidos,
que se sintió como si hubiera ganado una guerra. Tobey Maguire hace
una de sus mejores interpretaciones como Bobby Fischer, un actor que
en los últimos años no ha destacado mucho, después de la
popularidad que obtuvo con "Spiderman". Liev Screiber como
su contrincante en la ficción también hace un buen trabajo, en un
papel no tópico como puede ser habitual de una producción
estadounidense. Cabe destacar también la labor de Michael Stuhlbarg
y Peter Sarsgaard.
No hay comentarios:
Publicar un comentario