El notable actor nominado al Oscar por
"Hotel Ruanda" Don Cheadle dirige su primera película,
este drama estadounidense acerca del músico de jazz Miles Davis. En
la cima de una brillante carrera a la cabeza de la vanguardia y
modernidad de la innovación del jazz actual, el músico desaparece
de repente del ojo público durante cinco años a finales de los años
setenta. Solo en su casa, con un dolor crónico a causa del deterioro
de su cadera, con la voz mermada y entumecida por las drogas y los
analgésicos, vive atormentado por los fantasmas del pasado. La
película está lejos de un biopic convencional, la realización es
un poco imprevisible y sincopada como el estilo de la música jazz
pero también irregular. Don Cheadle ha realizado la obra ambiciosa
que quería hacer, aunque la producción no fue fácil llevarla a
buen puerto. El filme cuenta con una buena ambientación de época y
es un trabajo de amor a la figura de Miles Davis, muy bien
interpretado por Don Cheadle, en uno de los mejores personajes de su
carrera, bien acompañado por el estupendo actor Ewan McGregor como
un periodista, cuya labor impulsó a que el proyecto se
materializara. Es una pena que no estemos ante una gran película
pero sí es un filme notable alejado de los típicos productos
estadounidenses más fáciles de realizarse y la labor en la
dirección y actuación de Don Cheadle es digna de elogios.
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