El versatil director James Mangold, realizó "Lobezno: inmortal" y ahora ha vuelto al personaje de Wolverine con esta tercera y última película protagonizada por Hugh Jackman en el papel de Lobezno, ques e presentó en el festival de Berlín. La historia tiene lugar en un futuro donde las habilidades de Lobezno ya no son lo que eran, y apenas nacen mutantes. Logan, sin sus poderes, por primera vez es verdaderamente vulnerable y junto al mutante Caliban se ocupan de un ya mayor Profesor X. En ese momento, la corporación Transigen están convirtiendo a niños mutantes en máquinas de matar. Logan conoce a una de esas niñas, la de la mano en el poster, y se compromete a protegerla. Esta película fantástica es un poco sorprendente porque no es una convencional propuesta de la factoría Marvel, tiene un planteamiento pesimista, toques de western, es sobria pero con estallidos explíctos de violencia y habla de la vejez. La despedida de Hugh Jackman como un antihéroe Lobezno y Patrick Stewart como el Profesor X está a la altura y puede gustar a seguidores de los personajes de cómic.
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