Después de la saga de "Los juegos del hambre" el tándem formado por el director Francis Lawrence y la actriz Jennifer Lawrence vuelven a unirse en este film estadoundiense. Dominika Egorova es reclutada contra su voluntad para ser un “gorrión”, una seductora adiestrada del servicio de seguridad ruso. Dominika aprende a utilizar su cuerpo como arma, pero lucha por conservar su sentido de la identidad durante el deshumanizador proceso de entrenamiento. Hallando su fuerza en un sistema injusto, se revela como uno de los activos más sólidos del programa. Su primer objetivo es Nate Nash, un funcionario de la CIA que dirige la infiltración más confidencial de la agencia en la inteligencia rusa. Los dos agentes caen en una espiral de atracción y engaño que amenaza sus carreras, sus lealtades y la seguridad de sus respectivos países. Este es un estupendo thriller de espías que se centra más en la intimidad de los personajes que en la acción y el espectador no sabe lo que le espera. Sorprende un poco que en los grandes estudios de Hollywood haya espacio para propuestas estimulantes como esta. Es un film tenso con diversos giros y buen y frío ritmo si bien su duración excede a las dos horas. Está muy bien interpretado por la estrella Jennifer Lawrence como Dominika, a la que hay que agradecer que haga proyectos singulares como este o "Madre!". La acompañan Joel Edgerton como Nash, Jeremy Irons, Charlotte Rampling, Mary-Louise Parker y Matthias Schoenaerts. Este es uno de los films comerciales estadounidenses más interesantes de lo que llevamos de año y vale la pena si su actriz protagonista ayuda a que los jóvenes vean este tipo de cine más adulto.
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