De entre los abundantes estrenos que podemos encontrar en la cartelera de esta semana, tenemos la segunda película de Pablo Solarz después de la comedia "Juntos para siempre". Esta coproducción argentino-española cuenta el viaje de Abraham, un sastre judío de 88 años que decide embarcarse en la aventura de encontrar a un viejo amigo que le salvó hace más de siete décadas de una muerte segura durante el holocausto, hacia el final de la ocupación Nazi. Este es un interesante y correcto drama sobre la memoria histórico a través del personaje de Abraham y describe la comunidad judía argentina. La película no huye de los tópicos pero está muy bien interpretada por Miguel Ángel Solá, muy caracterizado en un personaje mayor que el actor, acompañado de buenos personajes, de entre de los cuales hay que destacar a las actrices Ángela Molina y Natalia Verbeke.
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