El fin de semana pasado se estrenaron varios títulos que podemos señalar. El conocido director iraní Mohammad Rasoulof, responsable de trabajos como “La isla de hierro” y “Un hombre íntegro”, pendiente de sentencia por mostrar la represión del Gobierno en su cine, nos presenta cuatro historias sobre la fortaleza moral y la pena de muerte que cuestionan hasta qué punto la libertad individual puede expresarse en un régimen despótico y no solo afecta a los condenados sino a la vida de los demás. Un poderoso viaje definido por las paradojas del pueblo iraní. Este es un duro y notable drama iraní en contra de la pena de muerte que remite a la excelente “El verdugo” de Berlanga. De las cuatro historias que componen el largometrake la primera de ellas es la mejor y las otras no llegan a esa altura. Aun así, esta es una obra valiente, sólida, muy bien realizada, en que la violencia queda implícita. El film ganó el Oso de oro a mejor película en el festival de Berlín del año pasado y obtuvo una mención especial del jurado en la Seminci de Valladolid.
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