Black phone * * *

Después de dirigir el notable film “Dr. Strange (Doctor Extraño) y abandonar su secuela por diferencias creativas, Scott Derrickson vuelve al cine de terror tras “Sinister” y la interesante “Líbranos del mal”. En una ciudad de Colorado, en los años setenta, un enmascarado secuestra a Finney Shaw, un chico tímido e inteligente de trece años, y le encierra en un sótano insonorizado donde de nada sirven sus gritos. Cuando un teléfono roto y sin conexión empieza a sonar, Finney descubre que a través de él puede oír las voces de las anteriores víctimas, las cuales están decididas a impedir que Finney acabe igual que ellas. Coproducida por Blumhouse, la película estadounidense de terror genera suspense hasta el tercer acto, logra ser angustiosa, es efectiva sin recurrir a giros de guion innecesarios, tiene una atmósfera lograda y sustos efectivos y apunta temas delicados como el maltrato infantil sin la corrección política de este tiempo en que vivimos. Además, la cinta cuenta con buenas actuaciones de Ethna Hawke como el psicópata enmascarado, Mason Thames y Jeremy Davies. Así pues, el director demuestra de nuevo su buen hacer en el cine de género.