Después de la miniserie “Irma Vep” el guionista y cineasta Olivier Assayas ha estrenado este largometraje francés estrenado en salas. Paul, un director de cine, y su hermano Etienne, un periodista musical, se encuentran atrapados en la casa de su infancia junto a sus parejas, Morgane y Carole. Mientras el mundo exterior se vuelve cada vez más inquietante, los cuatro deben enfrentarse al paso del tiempo, los recuerdos y los secretos ocultos. A medida que lidian con estas tensiones, descubren que sus mejores herramientas son las artes, el romance y la comedia, que impregnan incluso los momentos más cotidianos. Esta es una comedia dramática que Assayas realizó durante la pandemia en que combina bien el relato recreado con actores y el ensayo autibiográfico. Esta es una propuesta confesional que mezcla un tono cercano al documental sobre el legado familiar y un tono más de comedia ligera que puede recordar al cine de Woody Allen. Cabe señalar que se utiliza bastante el recurso de la voz en off y el protagonista quizás peca de muy verborreico si bien los actores Vincent Macaigne y Micha Lescot (“La gran juventud” hacen un buen trabajo. El film se presentó en la sección oficial de la pasada Berlinale y en la de la Seminci de Valladolid, obtuvo críticas dispares como una obra menor dentro de la filmografía de Asssayas aunque me parece estimable.
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