miércoles, 29 de marzo de 2023

Crónica de un amor efímero * * * *

 

 

Los amantes pasajeros

Recuerdo que vi una tarde de verano el notable film “Las cosas que decimos, las cosas que hacemos” que me gustó mucho. Seguidamente, el coguionista y director Emmanuel Mouret ha realizado este largometraje francés que se ha estrenado en salas. Una madre soltera y un hombre casado se vuelven amantes. Están comprometidos a verse solo por una aventura y no a encontrar ninguna esperanza de amor, sabiendo muy bien que la relación no tiene futuro. Sin embargo, cada vez se sorprenden más por su comprensión, su complicidad y el bienestar que experimentan juntos.

Estructurada a modo de diario, esta comedia romántica habla sobre las relaciones extramatrimoniales y la infidelidad, los miedos e inseguridades y la distancia entre lo que decimos y lo que realmente sentimos.  La película podría haber sido trágica y triste pero resulta más bien ligera y luminosa. Sigue siendo marca de estilo del director los abundantes diálogos y tiene como referente el cine de E. Rohmer y W. Allen. Cabe señalar la importancia de los espacios en que se mueven los personajes y la música. Si en su anterior título, el director presentaba un reparto coral, en este se centra en una tierna pareja; en este sentido, sobre la cuestión del apego uno de los dos sería más bien una persona ansiosa y la otra evitativa. La cinta está muy bien interpretada por Vincent Macaigne (se ha convertido en sustituto del Mouret actor en su filmografía) y Sandrine Kiberlain, y cuenta con Georguia Scaillet (“L’odeur de la mandarine”).

El film estuvo el año pasado en el festival de Cannes, en la sección oficial de la sección Albar del certamen de Gijón donde bien hubiera merecido ser premiado y fue nominado al premio César a mejor actor protagonista y podría haber estado presente en mejor actriz y guion original.

Valoración: 8

Lo mejor: las actuaciones de los protagonistas y el guion.

Lo peor: los diálogos pueden cansar al espectador.


 

Al principio el personaje de Simon podría caer antipático al espectador por ser infiel a su esposa pero acaba siendo el que más me ha emocionado. Charlotte ha tenido una aventura con un hombre tierno como él como previo paso inconscientemente a tener una relación lésbica con otra mujer. Dos años más tarde, aunque Simon sigue pensando en Charlotte, ya es demasiado tarde ya que ella tendrá un bebé con su pareja.

 

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