La semana pasada hubo varios estrenos en la cartelera española. Uno de ellos es el dirigido por Laura Mora, que dirigió capítulos de la miniserie “Frontera verde”. “Un día todos los hombres se quedaron dormidos… Y los cercos de la tierra, ardieron”. Una historia sobre la desobediencia, la amistad y la dignidad que existe en la resistencia. Rá, Culebro, Sere, Winny y Nano. Cinco chicos de la calle de Medellín. Cinco reyes sin reino, sin ley, sin familia, emprenden un viaje en búsqueda de la tierra prometida. Un cuento subversivo a través de un clan salvaje y entrañable, que transita entre realidad y delirio. Un viaje hacia la nada, donde pasa todo. Esta coproducción colombiana es un notable drama social realista sobre jóvenes en la calle que tiene como referente “Los olvidados” de Buñuel y está realizado con exaltación. La película en forma de road movie hacia ninguna parte tiene un componente desesperanzado y crudo pero también de ensoñación y poético. Cuenta con actores no profesionales que desprenden naturalidad como si no supieran que la cámara les graba. El film se alzó con la Con cha de oro a mejor largometraje y el premio Feroz Zinemaldia en el pasado festival de San Sebastián y obtuvo cuatro nominaciones a los premios Platino a mejor fotografía, montaje, música y sonido.
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