Presentada en la sección
oficial del reciente festival de Sitges, este es el debut de Hèctor
Hernández Vicens. El film cuenta la historia de una famosa y joven
actriz que es encontrada muerta en una habitación de hotel y es
trasladada a un hospital. Allí trabaja como celador un tímido chico
que cada vez que ve a una chica desnuda fallecida, no puede evitar
mirarla. Cuenta la aparición de Fritz a sus amigos, que van a la
morgue a verla y uno de ellos quiere practicar sexo con ella. Se
trata de un thriller eficaz y preciso, realizado con pocos medios y
que sabe mantener el interés en el espectador con sus giros de
guión. Además, la actriz Alba Ribas se mantiene como una buena
fallecida. No es una gran película pero gustará a los aficionados
al género, sobretodo a los más jóvenes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario