jueves, 8 de noviembre de 2018

SEMINCI de Valladolid 2018:

Un año más, no hay que pasar por alto el transcurso de uno de los festivales de cine de España más veteranos e importantes, que ha celebrado su edición número 63 entre los días 20 y 27 de octubre. Este año ha incrementado la asistencia de espectadores a este certamen y hay que decir que normalmente el público de Valladolid es culto, le interesa la cultura y, en concreto, el cine. En esta edición han sido premiados por su fructífera trayectoria la directora Iciar Bollaín, el director Juan Antonio Bayona, el actor Eduard Fernández y el programa de La 2 de TVE “Versión española” por sus 20 años de emisión.

Entrando en materia en la sección oficial a concurso, el jurado presidido por el director Miguel Gomes y compuesto por la actriz Bárbara Goenaga, entre otros, han elegido como triunfadora al film canadiense “Génesis” de Philippe Lesage, que con su anterior film “Los demonios” no tuvo mucha repercusión en el festival de San Sebastián. “Génesis” ha obtenido la Espiga de oro a mejor película, el premio a mejor director y al mejor actor para Théodore Pellerin, un triunfo semejante al del año pasado en la Seminci de “El Cairo Confidencial” de Tarik Saleh con tres premios incluyendo mejor película y director. El film de Lesage ya lo destacamos en su paso por el festival de Locarno y es estimable aunque quizás a priori no aparenta ser largometraje muy destacado. También se presentaron por primera vez en España otros films que ya habían formado parte de otros festivales como el estadounidense “The miseducation of Cameron Post” de Desiree Akhavan, que obtuvo la espiga de plata y el premio de la Juventud, el segundo premio de mayor importancia y ya ganó en el festival de Sundance. Otro de los títulos relevantes de la sección es el danés “The guilty” de Gustav Möller, que ya fue premiado en Sundance. Asímismo, el film de Singapur “A land imagined”, premiado en el festival de Locarno, obtuvo en Valladolid el premio a mejor fotografía. Otros films que se presentaron en la sección oficial y que ya se pudieron ver en otros certámenes internacionales fueron el italiano “Dogman” de Matteo Garrone, el sueco “Border” de Ali Abbasi y el noruego “Utoya. 22 de julio” de Erik Poppe, que no fueron premiados. Además, el cine español estuvo representado por “Tu hijo” de Miguel Ángel Vivas, que se encargó de inaugurar el festival y “Jaulas” de Nicolás Pacheco; así como la película argentina “Mi obra maestra” de Gastón Duprat y que recibió el premio del público, estos títulos se estrenan durante el mes de noviembre, y la italiana “Noches mágicas” de Paolo Virzi. El film que clausuró el certamen fue el alemán “Head full of honey” de Til Schweiger. 




Por lo que respecta a otros premios, la Espiga de plata al mejor cortometraje fue para el polaco “Temblores” de Dawid Bodzak y el mejor cortometraje en la sección Punto de encuentro fue el francés “Un monde sans betes” de E. Benestan y A. Lecouturier. Por otro lado, hay que añadir que el apartado de cine gay fue importante con el premio de Seminci joven para la cinta “Con amor, Simon” de Greg Berlanti y la Espiga arcoiris para la venozalana “Yo, imposible” de Patricia Ortega.

Seguidamente vamos a señalar los títulos más notorios que se presentaron en esta edición de la Seminci en la sección oficial y en otros apartados:

Los informes sobre Sarah y Saleem

Como una de las películas más destacadas de la sección oficial está la segunda de Muayad Alayan. Cuenta la relación adúltera de Sarah, una mujer israelí que dirige un café en el oeste de Jerusalén, y Saleem, palestino de Jerusalén, que trabaja como repartidor. Sus cónyuges se vuelven conscientes de los engaños de sus parejas después de que Saleem y Sarah se peleen en público, lo que sitúa a Saleem en el punto de mira de las fuerzas de seguridad israelíes. Esta coproducción palestina es un drama psicológico sobre las tensiones entre el oeste y el este de Jerusalén que ya formó parte del festival de Rotterdam de este año y que hubiera merecido ser reconocido en Valladolid. 

 

La caída del imperio americano

El director de “Jesus de Montreal” Denys Arcand ha dirigido esta sucesora temática de las películas de Arcand “El declive del imperio americano” y la oscarizada “Las invasiones bárbaras”. Se centra en un joven cuya vida cambia cuando encuentra dos bolsas de dinero en efectivo después de un robo a mano armada. Esta comedia en forma de sátira protagonizada por Alexandre Landry (visto en “Gabrielle”) obtuvo el premio FIPRESCI de la crítica de este festival. 

 

La mujer de la montaña

Otro film de los más destacados de esta Seminci es el segundo de Benedikt Erlingsson, que fue premiado con su ópera prima “De caballos y hombres” el premio Nuevos realizadores en el festival de San Sebastián. A sus cincuenta años, Halla, profesora de canto, declara la guerra a la industria local del aluminio, que está contaminando su país. Para ello, toma todo tipo de riesgos con el fin de proteger el medio ambiente en Islandia. Pero su situación podría cambiar con la llegada inesperada de una carta que da luz verde por fin a sus trámites de adopción de una niña. Esta coproducción islandesa es un imaginativo e inteligente drama feminista muy bien protagonizado por Halldora Geirharosdottir, que fue galardonada con el premio a mejor actriz, si bien la película era una de las favoritas para ganar la Espiga de oro. 

 

A la vuelta de la esquina

También fue premiada, con la Espiga de plata a mejor largometraje esta cinta de Thomas Stuber, responsable de “Herbert”. Esta es la historia de Christian, que es nuevo en el supermercado. Se adentra en este universo desconocido con la ayuda de su compañero Bruno, que le enseña todos los trucos de la profesión y se convierte en su amigo. En poco tiempo se enamora de Marion, que trabaja en el departamento de dulces y siempre bromea con él. Pero Marion está casada, aunque no es feliz en su matrimonio. Este emotivo y sutil drama romántico con toques de comedia está interpretado por los notables Frank Rogowski y Sandra Hüller. El film fue candidato a cuatro premios Lola del cine alemán incluyendo mejor película y ganó como mejor actor, se presentó en la pasada Berlinale y en la Seminci también ganó el Sociograph award.



Aga

Milko Lazarov ya realizó su primera película con “Alienation” pero ganó en la Seminci el premio Pilar Miró a mejor nuevo director por un primer o segundo largometraje gracias a esta coproducción búlgara que hace un bello homenaje a una cultura que desaparece en contraste con la tecnología. En una cabaña, en los campos abarrotados de nieve del norte, viven Nanook y Sedna, siguiendo las tradiciones de sus ancestros. Su vida empieza a cambiar cuando cazar se vuelve más difícil, los animales empiezan a morir de forma extraña y el hielo empieza a derretirse cada vez más. Chena, que los visita regularmente, es su única conexión con el exterior y con su hija Ága, que dejó la tundra hace tiempo. Cuando la salud de Sedna se deteriora, Nanook decide cumplir su sueño: visitar a Ága. La cinta ya se pudo ver fuera de competición en la Berlinale de este año.



Djon Africa

El cine portugués estuvo representado con el debut en el largometraje de Joao Miller Guerra y Filipa Reis. Trata sobre un joven rastafari que vive con su abuela en los suburbios de Lisboa y trabaja en el sector de la construcción. Nunca ha estado en Cabo Verde, el lugar de donde procede su familia, pero un encuentro casual le impulsa a viajar a ese país con la idea de encontrar a su padre, a quien nunca conoció. Este es un drama cálido, relajado y atmosférico con una buena actuación del actor protagonista Miguel Moreira. El film ya formó parte de la pasada edición del certamen de Rotterdam.



Entendiendo a Ingmar Bergman

Este es un film alemán dirigido por Margarethe von Trotta (directora de “Hannah Arendt”), Felix Moeller (“Forbidden films”) y el debut de Bettina Böhler. Se centra en una mirada a la vida y la obra del cineasta Ingmar Bergman, explorando su legado cinematográfico con colaboradores delante y detrás de la cámara. No estamos ante el típico documental biográfico, ya que cuenta emociones, anécdotas y recuerdos y hace un retrato humano y complejo del director. La cinta ya estuvo en la sección Cannes classics de este año y se ha estrenado a principios de noviembre en USA.



Cadáver exquisito

Fuera de la sección oficial, este es un cortometraje francés dirigido por Stéphanie Lansaque y François Leroy, que ya han realizado cortometres como “Mei Ling” y “Café frío”. Presenta una balada visual, acústica y olfativa a través de un perro vagabundo que sólo tiene un ojo. En el laberinto de las estrechas calles de Old Hanoi, la vida cotidiana y la leyenda se unen en un ritmo sincopado de Hat Xam, el blues vietnamita. Esta pieza de animación ganó el premio a mejor cortometraje en la Seminci de este año.



Morir para contar

Después de documentales como “Nacido en Gaza” y “Nacido en Siria”, Hernán Zin presentó en Valladolid este trabajo. Grandes reporteros de guerra cuentan sus peores recuerdos y la manera en que se enfrentan a ellos. Al mismo tiempo, conocemos de cerca el trabajo de quienes brindan ayuda a los periodistas que padecen estrés postraumático. Cada protagonista de “Morir para contar" habla de un conflicto en particular, por lo que es también un viaje a la guerra desde Vietnam hasta nuestros días, así como un homenaje a los compañeros. Este film de no ficción ganó el premio Doc España. 

 

Libre

En La Roya, un valle del Sur de Francia en la frontera con Italia, Cédric Herrou, un granjero, cultiva olivos. Un día cruza la ruta de los refugiados, y junto con otros habitantes del valle, decide acogerlos, brindarles refugio y ayudarles a pedir asilo. Pero al hacerlo, se considera que está violando la ley. Michel Toesca, viejo amigo de Cédric y habitante de la Roya, lo siguió durante tres años como testigo afectado y consciente, con su cámara. Participó y filmó día a día la resistencia ciudadana. Michel Toesca debuta en el largometraje con este interesante documental francés que reflexiona sobre la llegada de inmigrantes a Europa que piden asilo. El film ya se pudo ver en el certamen cannois.



Yomeddine

Otra destacada ópera prima es la de A. B. Shawky que cuenta la historia de un leproso copto y su aprendiz huérfano que dejan los confines de la colonia de leprosos por primera vez y se embarcan en un viaje a través de Egipto para buscar lo que queda de sus familias. Esta bienintencionada y humana película egípcia fue recibida con irregularidad en la sección oficial de Cannes y obtuvo el premio del jurado joven y el del público en la sección Punto de encuentro del festival de Valladolid.



Our new President

Para finalizar, también en la sección Punto de encuentro se presentó este film estadounidense de Maxim Pozdorovkin (“Pussy Riot: una plegaria punk”) que ganó el segundo premio. Trata acerca de la historia de la elección de Donald Trump narrada completamente a través de la propaganda rusa. Este es un revelador documental que ganó el premio a mejor montaje en la sección documental World cinema en el festival de Sundance.





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