Otro
largometraje que podemos encontrar en salas es el segundo dirigido
por Felix Randau después de “The calling game”. En
los Alpes Ötztal, hace más de 5.300 años, se estableció un clan
neolítico, cuyo líder, Kelab, era el guardián del santuario
sagrado, Tineka. Un día, mientras Kelab se marcha a cazar, el
asentamiento es atacado y los miembros de la tribu son brutalmente
asesinados, incluyendo la esposa de Kelab y su hijo. El santuario es
robado y el único superviviente es un bebé recién nacido. Cegado
por el dolor, Kelab emprende un viaje para buscar venganza y no tiene
otra opción que llevarse al niño con él. Esta coproducción
alemana es un interesante drama de aventuras en la época
prehistórica realizado con realismo, en el aspecto narrativo es
sencillo pero en conjunto está cuidada en detalles y tiene bonitos
paisajes. La película tiene como referente “En busca del fuego”
de Jean-Jacques Annaud y no “El renacido” de Alejandro G.
Iñárritu. Bien interpretado por el actor Jürgen Vogel
(protagonista de “La ola”), el film fue nominado a los premios
Lola del cine alemán a mejor sonido y maquillaje.
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