Ben-Hur * *

 Ante la noticia de un remake del clásico ganador de once Oscar de William Wyler y de la mano del director de cintas de acción Timur Bekmambetov (después de la más bien fallida "Abraham Lincoln: cazador de vampiros") uno pensaba que el proyecto no era necesario. Juda Ben-Hur es un príncipe falsamente acusado de traición por su hermano adoptivo Messala, un oficial del ejército romano. Sin su título y separado de su familia y de la mujer que ama, Judah condenado a ser esclavo en las galeras. Después de unos años, el hombre regresa a su tierra natal para vengarse. Este es un filme de aventuras que tal vez simplemente tiene como objetivo ser un blockbuster que entretenga al público. Lo consigue a medias y no logra modernizar con acierto el filme de 1959, que llegó a lo más alto del péplum majestuoso de esa época dorada de Hollywood. El filme cambia algunos aspectos de la novela original de Lewis Wallace y de la película de Wyler pero la historia es esencialmente la misma, algo que es positivo ya que era sólida pero no ha ganado realismo. El filme tiene algunos momentos espectaculares y la recordada carrera de cuadrigas es potente pero se agradece que el metraje sea la mitad del clásico protagonizado por Charlton Heston. El reparto de actores es atractivo pero no hay grandes actuaciones: Jack Huston es un atractivo Judah, Toby Kebbell como Messala y Nazanin Boniadi como la amada del protasgonista. También participan Morgan Freeman en el papel de un dudoso árabe que parece divertirse y que sigue en sintonía de esos papeles que hace estos años como el de "Oblivion" con Tom Cruise, y Rodrigo Santoro. En conjunto, la propuesta es un poco fallida por un director mal elegido y no va más allá del simple entretenimiento dirigido sobre todo a las nuevas generaciones que no conozcan la historia.