En la cartelera española se han estrenado a principios de abril varios títulos que podemos señalar como el ucraniano “Esta lluvia nunca cesará” y el ecuatoriano “El rezador”. El que nos ocupa es el dirigido por Andrea Arnold tras su anterior largometraje “American honey”. “Cow” retrata el día a día de una vaca en un criadero, siguiendo desde dentro y de manera inmersiva todo el proceso en el que se ve involucrado el animal desde que amanece hasta que acaba el día. Una manera de tomar conciencia y consideración sobre una especie que nos da casi todo y sobre la que en realidad no sabemos nada. Así, nos sumerge en la trayectoria vital y la rutina de trabajo de una vaca en una explotación ganadera. Este es un singular y notable documental británico que a priori puede parecerse al film “Gunda” en que lo más destacado es el punto de vista de la directora que filma a la vaca a la misma altura que los ojos del espectador, es una obra señorial, sensible y de denuncia como un ser vivo que forma parte del sistema y el engranaje productivo. Además, logra que un servidor empatice con un animal como este. El film se pudo ver el año pasado en el festival de Cannes, ganó el premio a mejor montaje en el festival de cine europeo de Sevilla, obtuvo cuatro nominaciones a los premios BIFA a mejor documental, fotografía, montaje y sonido y fue candidato al premio BAFTA en su categoría.
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