En la cartelera española se estrenaron varios títulos estadounidenses a destacar. Uno de ellos es el dirigido por Steven Soderbergh tras “Presence” que se estrenó hace unas semanas. George Woodhouse es una eminencia en el mundo de los agentes de inteligencia británicos pero cuando su propia pareja es sospechosa de traición se enfrentará a su misión más imposible. Así, cuando su amada esposa Kathryn es sospechosa de traicionar a la nación, el legendario agente se enfrenta a la prueba definitiva: la lealtad a su matrimonio o a su país. Escrito por el guionista David Koepp (responsable de taquillazos como “Spider-man”, este es un notable thriller con clase que actualiza el género de espías, evita los clichés de este tipo de cine y está más cerca de una adaptación de John Le Carré que de una entrega de la saga de James Bond. La película resulta eficaz, elegante, muy entretenida, tiene un punto de ligereza, buenos diálogos y un ritmo ágil. Además, el film cuenta con un estupendo reparto de actores formado por Michael Fassbender, Cate Blanchett, Gustav Skarsgard ("438 days"), Tom Burke, Pierce Brosnan, Marisa Abela, Naomie Harris y Regé-Jean Page (que suena como aspirante al próximo nuevo agente 007 pero no me gustaría que fuera el elegido). Por último, podemos decir que este es uno de los últimos títulos más logrados de Soderbergh sino el mejor.
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